“No están desaparecidos, están detenidos”, dijo el fiscal general, designado por la Constituyente, Tarek William Saab, sobre los tres activistas de la ONG defensora de derechos humanos, FundaRedes, detenidos desde el 2 de julio.
Durante una alocución transmitida por el canal del Estado, VTV, Saab confirmó que al director de Fundaredes, Javier Tarazona, a su coordinador en Falcón, Omar de Dios García y al hermano del primero, Rafael Tarazona, fueron presentados el 2 de julio, ante el Tribunal Tercero con competencia en Terrorismo.
También informó que les fueron imputados delitos de promoción al odio, traición a la patria y terrorismo y que se acordó medida privativa de libertad. Saab se quejó que desde el inicio, tuvo “manipulación mediática”, al denunciarse que los activistas de DDHH, fueron víctimas de detención arbitraria y desaparición forzada.
“Están sujetos a una acción de carácter penal, presentados ante un órgano judicial correspondiente y eso echa por tierra toda esa desinformación que supuestamente decía que estos ciudadanos habían sido secuestrados y se encontraban desaparecidos, todo lo contrario, la detención fue acordada por un tribunal, actuó un órgano auxiliar de la justicia, el Sebin, cumpliéndose todas las formalidades de ley”, aseguró.
Indicó además que Tarazona y su equipo permanecen recluidos en el centro de detención Hombre Nuevo, Simón Bolívar, en el Paraíso, Caracas.
El grupo de activistas había acudido el mismo día de la detención a las oficinas del Ministerio Público (MP) en Coro, para denunciar hostigamiento de hombres armados en contra de FundaRedes.
Director de Fundaredes denuncia ante el MP hostigamiento de hombres armados
Experticias
Saab aseguró, basado en “experticias” realizadas a los teléfonos celulares de los activistas, que ellos habrían recibido instrucciones de “agentes externos”, es decir, extranjeros, para “desestabilizar el país”. Acotó que dichas experticias continúan por cuanto hay información que fue borrada y su recuperación es importante para establecer las identidades de quienes supuestamente se comunicaban con Javier Tarazona.
“En dichos teléfonos se ha logrado verificar la existencia de mensajería con personas que estamos por identificar porque los números son internacionales y los agentes son nombrados a través de pseudónimos, sostenían comunicación con el ciudadano José Javier Tarazona, los cuales llegaron a instruirle que denunciara públicamente la articulación del ELN y las Farc con autoridades venezolanas”, denunció.
Rechazó que Tarazona hiciera las acusaciones sin fundamento alguno, con el único fin de posicionar a Venezuela como Estado promotor del terrorismo, “bajo la fachada de una ONG”. Advirtió que la información que propagó el activista “incita al odio” y atenta contra la seguridad del país.
“En declaraciones públicas Javier Tarazona denunció sin presentar ninguna evidencia, salvo una foto sin fecha. Afirmando además que el ELN tiene presencia en 21 entidades del país, sin presentar ningún documento que avale esas afirmaciones. Recordemos que las personas deben ser responsables por lo que dicen. Si una ofensa se dice para informar, sin medios de prueba ni sustento formal, estamos ante un hecho punible” , sostuvo el funcionario.
Rechaza señalamientos
Saab condenó además que Tarazona señalara, también sin pruebas, supuestas relaciones comerciales del Estado con los grupos delictivos (ELN-Farc) basadas en la explotación de oro, diamantes y coltán, la existencia de pistas clandestinas y laboratorios de procesamiento de drogas.
“Seguro que este señor es un adicto a las narcoseries y narconovelas colombianas. Transmuta lo que se ve en Colombia hacia nuestro país” ironizó. (Ambien)
Alertó además que las acciones de los defensores de DDHH, buscan justificar nuevas agresiones contra el país y allanar el camino a “futuras intervenciones extranjeras”.
Este martes 6 de julio, activistas de DDHH protestaron a las puertas de la sede del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud) para pedir a la comunidad internacional una mayor presión que logre la liberación de los activistas de FundaRedes. Jóvenes de varias ONG ratificaron que los activistas fueron víctimas de detención arbitraria y desaparición forzada.