Amnistía Internacional y la Oficina de Washington para América Latina (WOLA) rechazaron la imposición de visas para venezolanos por parte de México.
Aunque es un proyecto que está en borrador, este viernes se dio a conocer que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (Amlo) pretende pedir visa a las y los venezolanos que entren al país norteamericano para con ello cortar el flujo migratorio hacia Estados Unidos.
Para la directora de las Américas de Amnistía Internacional, Érika Guevara Rosas, esta medida «es un golpe duro» para quienes salen del territorio venezolano por la crisis política, económica y social.
«Este es un golpe duro para las personas que huyen de Venezuela debido a las masivas violaciones de #DDHH cometidas por el gobierno de @NicolasMaduro«, escribió en su cuenta de Twitter Guevara Rosas.
Además cuestionó a Amlo por tomar esta decisión. «Un ejemplo más de que la política de @lopezobrador de migración y refugio supuestamente ‘humanitaria’ es una falacia», expresó la representante para América de la organización internacional dedicada a la defensa de los derechos humanos.
El gobierno mexicano baraja pedir entre los requisitos a venezolanas y venezolanos que demuestren que tienen solvencia económica, un empleo y además un boleto de avión de retorno a su país.
La presidenta de WOLA, Carolina Jiménez Sandoval, también rechazo la imposición de visas para la población venezolana.
Recordó que ante la «violación masiva de derechos humanos» en Venezuela, muchas personas optan por huir del país. Uno de los países que prefieren es Estados Unidos, al que entran por la frontera con México.
«La mayoría de las personas venezolanas que huyen de #Venezuela necesitan protección como #refugiadas«, recordó Jiménez Sandoval al cuestionar la decisión de López Obrador.
Además, insistió en la necesidad de proteger a la población venezolana que sale forzada del país.
«La respuesta necesaria es que se generen sistemas de protección. La respuesta de México es imponer visas», cuestionó.
De acuerdo con la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela, conocida como R4V, una de las dificultades que más afrontan las y los venezolanos en México es «la falta de tramitación oportuna de los procedimientos de determinación de la condición de persona refugiada y de la documentación relativa al estatus migratorio».
Esto le impide a la migración venezolana optar por servicios de salud y educación, según el R4V.
La imposición de visas, según lo que se conoce, sería un acuerdo entre México y Estados Unidos, ante la presión de este último país por frenar la creciente entrada de connacionales a su territorio, según la agencia Reuters.
Denuncian éxodo de migrantes sin papeles, pérdidas en agricultura y poca mano de obra en Florida
«Volvería a pasar 1.000 veces el Darién antes de cruzar México camino a EE.UU.»
Cartel del Golfo secuestra a 50 migrantes en México, entre ellos venezolanos
Amnistía Internacional califica de crueles e inhumanas nuevas normas migratorias de EEUU
Trump dice que acabará con la ciudadanía automática para hijos de indocumentados
Los países suramericanos crean un grupo de trabajo sobre la integración, pero sin plazos
Maduro dice que Petro se está convirtiendo en un «garante» del diálogo venezolano
En Mérida reportan crecida de los ríos Milla y Albarregas y la Quebrada El Arado
Comité de la ONU señala que Venezuela no previene adecuadamente el tráfico de personas
No es una narrativa: Uruguay y Chile critican posición de Lula sobre derechos humanos en Venezuela
Amnistía Internacional y la Oficina de Washington para América Latina (WOLA) rechazaron la imposición de visas para venezolanos por parte de México.
Aunque es un proyecto que está en borrador, este viernes se dio a conocer que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (Amlo) pretende pedir visa a las y los venezolanos que entren al país norteamericano para con ello cortar el flujo migratorio hacia Estados Unidos.
Para la directora de las Américas de Amnistía Internacional, Érika Guevara Rosas, esta medida «es un golpe duro» para quienes salen del territorio venezolano por la crisis política, económica y social.
«Este es un golpe duro para las personas que huyen de Venezuela debido a las masivas violaciones de #DDHH cometidas por el gobierno de @NicolasMaduro«, escribió en su cuenta de Twitter Guevara Rosas.
Además cuestionó a Amlo por tomar esta decisión. «Un ejemplo más de que la política de @lopezobrador de migración y refugio supuestamente ‘humanitaria’ es una falacia», expresó la representante para América de la organización internacional dedicada a la defensa de los derechos humanos.
El gobierno mexicano baraja pedir entre los requisitos a venezolanas y venezolanos que demuestren que tienen solvencia económica, un empleo y además un boleto de avión de retorno a su país.
La presidenta de WOLA, Carolina Jiménez Sandoval, también rechazo la imposición de visas para la población venezolana.
Recordó que ante la «violación masiva de derechos humanos» en Venezuela, muchas personas optan por huir del país. Uno de los países que prefieren es Estados Unidos, al que entran por la frontera con México.
«La mayoría de las personas venezolanas que huyen de #Venezuela necesitan protección como #refugiadas«, recordó Jiménez Sandoval al cuestionar la decisión de López Obrador.
Además, insistió en la necesidad de proteger a la población venezolana que sale forzada del país.
«La respuesta necesaria es que se generen sistemas de protección. La respuesta de México es imponer visas», cuestionó.
De acuerdo con la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela, conocida como R4V, una de las dificultades que más afrontan las y los venezolanos en México es «la falta de tramitación oportuna de los procedimientos de determinación de la condición de persona refugiada y de la documentación relativa al estatus migratorio».
Esto le impide a la migración venezolana optar por servicios de salud y educación, según el R4V.
La imposición de visas, según lo que se conoce, sería un acuerdo entre México y Estados Unidos, ante la presión de este último país por frenar la creciente entrada de connacionales a su territorio, según la agencia Reuters.