El presidente de la Comisión Delegada Legislativa, Juan Guaidó insiste que con el apoyo de la comunidad internacional seguirán presionando para que Nicolás Maduro acepte elecciones presidenciales «libres, justas y verificables» antes de 2024. Esto, pese a la paralización de las negociaciones en México desde octubre de 2021.

 En entrevista con ABC internacional, el líder opositor advirtió que sin garantías democráticas, las presidenciales de 2024 pueden resultar una «quimera» como el intento fallido de revocatorio de 2022.

 «Las condiciones son las mismas con un Consejo Nacional Electoral (CNE) secuestrado en la misma dictadura. Esperar no es una opción para los venezolanos, tenemos que actuar ya activando un proceso de negociación que permita un acuerdo a través de la presión y la justicia internacional, para terminar cuanto antes en una elección justa y libre», señala Guaidó.

 «Tenemos que hablar de condiciones»

 En este sentido, llama a construir la mayoría, fortalecer la unidad y corregir los errores, tomando en consideración que el antichavismo en Venezuela es mayoría.

 «Tenemos que hablar de las condiciones, empezando por la fecha, evaluar a los venezolanos en el exterior, encontrar el equilibrio en el sistema judicial. Es un falso dilema hablar de 2024 o del revocatorio sin debatir lo antes posible sobre las condiciones electorales», advierte.

 Fue la misma argumentación, la de las elecciones sin garantías democráticas, esgrimida por Guaidó por la que la oposición no participó en las parlamentarias de 2020, las regionales de 2021 y no respaldar, al menos en el inicio, la propuesta de revocatorio para este año.

 A diferencia de 2020, fue la dirigencia regional de los partidos la que, pese a la postura de Guaidó,  impulsó la inscripción de candidatos en las elecciones de gobernadores y alcaldes, con resultado cuatro gobernaciones para la oposición y más de 100 alcaldías, que pese a los esfuerzos fue dividida a los comicios.

 «Fraude continuado»

 Guaidó calificó como un «fraude continuado» la recolección de huellas dactilares para la solicitud de un referendo revocatorio, convocada por el CNE para el 26 de enero y que por ello los 1.200 puntos habilitados estuvieron vacíos. Dejó entrever que aunque no simpatizaban con la propuesta del Movimiento Venezolano por el Revocatorio (Mover), se evaluaba el apoyo en caso de que el proceso fuera viable.

 «La dictadura terminó matando al revocatorio antes de que pudiéramos concretar algo», dijo.

 Señaló que con el revocatorio pudo ocurrir lo de la elección del gobernador en Barinas -donde el opositor Sergio Garrido venció al chavista Jorge Arreaza – pero que siempre se estuvo cosnciente de que la administración de Nicolás Maduro junto al CNE, lo sabotearía en cualquier momento.

 «No es buscar a la gente que va a firmar, porque la tenemos, sino replicar lo de 2015, cuando ganamos la mayoría de las legislativas, y el éxito de 2021 en Barinas, es decir, enfrentarnos a la dictadura (…) Con movilización, presión social, unidad de la oposición y objetivos claros», agregó.