«Lo que cometen con él es una injusticia«, expuso Juana Avellaneda, periodista peruana que presenció el arresto arbitrario del reportero gráfico Jesús Medina Ezaine el 29 de agosto. Esto ocurrió en Plaza Venezuela, Distrito Capital.
Avellaneda asegura que Medina Ezaine había logrado que ella entrara al Hospital Clínico Universitario (HCU) para registrar las precarias situaciones que viven en el recinto médico. Afuera la esperaban el reportero venezolano y otro comunicador peruano, Luis García.
Al terminar la pauta, caminaron desde allí hasta la estación del Metro Plaza Venezuela, cuando fueron abordados por hombres armados. Uno de ellos apuntó directamente a la cabeza de Medina Ezaine.
«Jesús fue un héroe. Le preguntaron que si nos conocía y él dijo que no, porque sabía que si decía que sí, hoy estaríamos presos«, expuso en un video que fue difundido por el otrora preso político Vilca Fernández, quien ahora reside en Perú.
Este 31 de agosto, dos días después de esa detención, Medina Ezaine fue imputado por los delitos de legitimación de capitales, asociación para delinquir, instigación al odio y obtención de lucro ilegal contra actos de la administración pública. Durante esos dos días no pudo comunicarse con abogados o familiares.
El Tribunal 13° de Control del Área Metropolitana de Caracas (AMC) lo privó de libertad por estos delitos y fijó el sitio de reclusión en el Centro para Procesados Militares (Cenapromil) de Ramo Verde, en el estado Miranda. Este recinto carcelario está dispuesto para albergar a miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb).
«Nosotros hemos podido ver, gracias a él (Medina Ezaine), cómo la gente sufre, come de la basura, cómo los niños mueren porque no hay medicinas. ¿Dónde está Jesús Medina ahora? Está detenido. No puede ser posible, si yo estoy haciendo este video, y estoy dando mi testimonio es gracias a él. Por favor, ayúdenlo», exigió la periodista peruana a las organizaciones internacionales de derechos humanos.
Jesús Medina Ezaine queda privado de libertad, tras dos días desaparecido
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«Lo que cometen con él es una injusticia«, expuso Juana Avellaneda, periodista peruana que presenció el arresto arbitrario del reportero gráfico Jesús Medina Ezaine el 29 de agosto. Esto ocurrió en Plaza Venezuela, Distrito Capital.
Avellaneda asegura que Medina Ezaine había logrado que ella entrara al Hospital Clínico Universitario (HCU) para registrar las precarias situaciones que viven en el recinto médico. Afuera la esperaban el reportero venezolano y otro comunicador peruano, Luis García.
Al terminar la pauta, caminaron desde allí hasta la estación del Metro Plaza Venezuela, cuando fueron abordados por hombres armados. Uno de ellos apuntó directamente a la cabeza de Medina Ezaine.
«Jesús fue un héroe. Le preguntaron que si nos conocía y él dijo que no, porque sabía que si decía que sí, hoy estaríamos presos«, expuso en un video que fue difundido por el otrora preso político Vilca Fernández, quien ahora reside en Perú.
Este 31 de agosto, dos días después de esa detención, Medina Ezaine fue imputado por los delitos de legitimación de capitales, asociación para delinquir, instigación al odio y obtención de lucro ilegal contra actos de la administración pública. Durante esos dos días no pudo comunicarse con abogados o familiares.
El Tribunal 13° de Control del Área Metropolitana de Caracas (AMC) lo privó de libertad por estos delitos y fijó el sitio de reclusión en el Centro para Procesados Militares (Cenapromil) de Ramo Verde, en el estado Miranda. Este recinto carcelario está dispuesto para albergar a miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb).
«Nosotros hemos podido ver, gracias a él (Medina Ezaine), cómo la gente sufre, come de la basura, cómo los niños mueren porque no hay medicinas. ¿Dónde está Jesús Medina ahora? Está detenido. No puede ser posible, si yo estoy haciendo este video, y estoy dando mi testimonio es gracias a él. Por favor, ayúdenlo», exigió la periodista peruana a las organizaciones internacionales de derechos humanos.
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