«No somos enemigos del referendo revocatorio (RR) porque es un derecho constitucional», coinciden en señalar dirigentes de partidos políticos de oposición dentro y fuera del llamado G4.
El problema es, señalan, que su ejercicio se dificulta, por no decir que se imposibilita, bajo un Gobierno que no es democrático y que controla al resto de los Poderes Públicos.
Miembros Acción Democrática (AD), Voluntad Popular (VP), Primero Justicia (PJ) y Un Nuevo Tiempo (UNT), consultados por Efecto Cocuyo, no ocultaron su sorpresa ante la decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE) de aprobar tres solicitudes de revocatorio contra el mandato de Nicolás Maduro, para que las organizaciones que lo promueven procedan a recoger las manifestaciones de voluntad, pero la ven con cautela.
No dudan que en lo adelante el chavismo «hará lo imposible» para que el referendo no se realice.
La noche de este 17 de enero, el CNE anunció que las solicitudes de RR fueron impulsadas por el Movimiento Venezolano por el Revocatorio (Mover), Todos Unidos por el Referendo Revocatorio y el Comité Ejecutivo Nacional de Confedejunta, en conjunto con el Comité de la Democracia Nacional como Internacional. Procede ahora que la Junta Electoral Nacional elabore ahora el cronograma para la recolección de las firmas equivalentes a 20 % del Registro Electoral.
Alerta
«No se trata de estar a favor o en contra del revocatorio, los hechos hablan por sí solos, son dos experiencias pasadas negativas. En 2004 (Hugo) Chávez retrasó el revocatorio, ordenó una nueva recolección de firmas, mientras aplicaba las misiones sociales para subir en las preferencias y, luego, lo aceptó, manipuló los tiempos abiertamente», expresó el dirigente de PJ, Juan Carlos Caldera.
Recordó, igualmente, que en 2016 la iniciativa de referendo enfrentó trabas desde el principio hasta que se acabó con el proceso por la vía judicial, mediante sentencias de tribunales de estados que anularon firmas. Para entonces el CNE decidió que la recolección de 20 % de las firmas debía ser por estados y no nacional. En esta oportunidad se aspira a que dicha regla, entre otras, sea modificada.
«El revocatorio no depende tanto de la gente sino del régimen y de todo lo que esté dispuesto a hacer para evitarlo. Por eso hay que estar alerta ante esa decisión del CNE», apunta Caldera, quien en varios procesos electorales ha fungido como representante de la oposición ante el Poder Electoral, incluido el intento de revocatorio de 2016.
La dirigencia confirma que el RR es tema de discusión tanto a lo interno de las organizaciones políticas como entre los partidos que forman parte de la plataforma unitaria que acompaña a Juan Guaidó.
Dicen estar conscientes que muy pronto deben dar a conocer ante la opinión pública una posición al respecto, con la «máxima unidad posible», algo que no se logró para las elecciones regionales del 21 de noviembre y se rectificó a medias para los comicios de Barinas el 9 de enero.
«Es una materia que estamos estudiando, revisando entre todos los factores políticos para ver su pertinencia y viabilidad, no es sencillo, la experiencia que hemos tenido ha sido contraproducente, con un gobierno haciendo maniobras para obstaculizarlo. Llegado el momento la oposición debe hacer lo posible para que la pelota quede del lado de la cancha del gobierno (maniobrar para impedir el RR) y dejarlo en evidencia», señaló el diputado de 2015 y miembro de UNT, Guillermo Palacios.
Exigir condiciones
Para el parlamentario (2015) de AD, William Dávila, la sombra de 2016 está muy presente, por lo que no se trata de que solo se le dé luz verde al proceso sino de que se cambien las reglas y que no se aplique la misma normativa de hace 5 años. Reglamento que la organización Mover pidió al CNE modificar para facilitar el derecho a votar por la revocatoria o no del mandato, en este caso presidencial.
«Por ejemplo, para el revocatorio debe aplicar una sola circunscripción nacional que es la que elige al presidente de la República por lo que 20% de las firmas debe ser el Registro Electoral nacional y no por estados como ocurrió en 2016 ¿Qué pasará con la diáspora, podrá participar? Las condiciones son tan importantes como la elección en sí», resaltó.
Mover también solició que la recolección de manifestaciones de voluntad se haga mediante captahuellas sin necesidad de emplear las firmas, para así evitar que Miraflores use argumentos como las rúbricas planas (repetidas) para anular el proceso.
Dudas
«Lo que hay que preguntarse es si realmente el referéndum es una herramienta validad circunstancialmente para promover los cambios necesarios que garanticen el rescate de nuestras libertades y nuestra democracia, o por el contrario, es una herramienta, que dada la cooptación de las instituciones por parte del régimen de Nicolás Maduro, termina convirtiéndose en una herramienta que favorezca su posicionamiento y permanecía en la usurpación», manifestó la diputada de 2015 y miembro de VP, Olivia Lozano.
La legisladora indica que sobre tales interrogantes debe centrarse la discusión en las próximas semanas en el seno opositor. El presidente de la Comisión Delegada Legislativa, Juan Guaidó, también admitió que el tema se discute pero mantiene su posición de seguir presionando por presidenciales adelantadas con garantías democráticas.
Para Lozano, el hecho de que el RR esté contemplado en el artículo 72 de la Carta Magna no quiere decir que aplique en la actual coyuntura política, que estén dadas las condiciones y las garantías necesarias para promoverlo, llevarlo a cabo y que se respete la decisión de la mayoría.
«Nadie puede obviar la grave situación institucional que no ofrece garantías a la ejecución de ese recurso. Entendiendo la diversidad de pensamientos y posturas sobre el tema, es un debate que aún está por darse», agregó.
La oposición se enfrenta al dilema según el cual, si acepta ir a un revocatorio, a juicio de algunos se reconoce a Maduro como presidente y de perderse el referendo, quedaría legitimado para culminar su período presidencial en 2024, algo contradictorio con la existencia del Gobierno interino que preside Guaidó.
Entusiasmo
El líder del Movimiento por Venezuela (MPV), Simón Calzadilla, advirtió que en las regiones hay «entusiasmo» por el revocatorio entre la dirigencia partidista, por lo que cree que el tema debe ser discutido en la oposición lo antes posible para tratar de llegar a una decisión consensuada sobre participar o no en el proceso.
MPV, miembro de la dirección de la plataforma unitaria, participó con tarjeta propia en las elecciones regionales del 21 de noviembre, con la que postuló tanto a abanderados de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) como otros candidatos independientes según la región.
Desde su posición personal, Calzadilla admite que ve con simpatía el uso del mecanismo constitucional y que de participar, la oposición debe ir unida, para evitar lo que ocurrió el 21 de Noviembre, cuando se perdieron la mayoría de las gobernaciones producto de la división.
«Hay que poner el oído en las regiones. Es una decisión (la de participar en el RR en las regiones) que pudiera pasarle por encima a las direcciones nacionales de los partidos», alertó.