Eran las 5:30 de la tarde cuando las sirenas policiales avizoraron la llegada de un autobús Youtong rojo que trasladaba a los presos políticos. El trayecto era desde la sede de la Cancillería hasta la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en El Helicoide, en Caracas. Ansiosos y esperanzados, los familiares esperaban a un lado de la calle con pancartas y franelas que tenían fotos y frases en apoyo a la libertad de los detenidos. “Ahí vienen, Ahí viene”, se escuchó al unísono este sábado, 2 de junio.
Por las ventanas de la unidad colectiva, perteneciente al Gobierno venezolano, se notaban las caras de felicidad de quienes estuvieron por años recluidos en la sede de la policía política del país y que en minutos serían excarcelados. El diputado Renzo Prieto saludó a los presentes e hizo la señal de la paz, mientras que desde afuera las personas gritaban: libertad.
Tras el arribo del autobús, la madre de los hermanos José Ismael y Víctor Fabio Vega Rosario, detenidos por componer la canción Hampa vs. Pacos, cayó desmayada en el pavimento. Quienes la acompañaban decían: Ella ha estado muy nerviosa y creemos que no los vio en la unidad.
De manera repentina apareció Daniel Ceballos, quien apenas estaba cumpliendo 24 horas de ser excarcelado, el exalcalde de San Cristóbal, fue a El Helicoide a “solidarizarse” con sus compañeros de reclusión.
Los excarcelados
A las 6:43 pm el primero en salir de los calabozos del Sebin fue Yeferson Rodríguez, quien era escolta del diputado Richard Blanco. Entre llantos y alegría una mujer y una niña le brincaron encima para abrazarlo. Yeferson soltó el bolso que tenía y devolvió el tan esperado abrazo. “El anillo, dónde está el anillo”, le preguntaban los familiares de Rodríguez a la mujer.
Tras la salida de Rodríguez, los familiares y amigos de los detenidos esperaban impacientes, “¿Serán esos que vienen allí?”, se preguntaba una señora. 45 minutos después, se produjo la segunda excarcelación del día. Gregory Sanabria, quien estuvo preso por más de 3 años, abrazó a uno de sus familiares y gritó, “¡Libertad! No puedo dar declaraciones a la prensa”.
Junto a Sanabria también salió Roberto Picón, exasesor de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y que estaba cumpliendo arresto domiciliario. “El tiene otras medidas de restricción pero ya no vamos a tener al Sebin en nuestra casa”, dijo su esposa a medios de comunicación.
En el tercer y último grupo de excarcelados del día salió el diputado a la Asamblea Nacional, Renzo Prieto, con un bolso y la imagen de una virgen en las manos gritó frente al portón del Sebin: “Libertad, nojoda, al fin se hizo justicia”. Prieto estuvo detenido en El Helicoide desde 2014 y fue electo diputado en las pasadas elecciones parlamentarias del 6 de diciembre de 2015. Ante la pregunta de si se iba a juramentar en la Asamblea Nacional Renzo no dudo en responder: “Claro que sí, lo más pronto posible”. El martes, dijeron sus asesores presentes.
En el grupo del parlamentario también estaba José Vicente García, exconcejal tachirense que fue detenido por el Sebin en octubre de 2016. A pesar de la restricción que todos los excarcelados tienen para dar declaración a los medios García dijo “como no puedo dar declaraciones a la prensa le puedo hablar a mi gente. Estamos más fuertes que nunca y la libertad la vamos a conquistar. Venezuela tiene una generación que decidió dar un paso adelante”.
Entre lágrimas, Gabriel Vallés, abrazaba a su madre que está en silla de rueda. La madre del joven excarcelado le susurraba al oído y el joven la abrazaba arrodillado, “respira que estás en libertad”, le decían los presentes, mientras la mujer lo consolaba.
Tras la excarcelación del último grupo de presos políticos los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana cerraron los portones del Sebin, “hoy no habrá nuevas liberaciones”, dijo un oficial a los demás familiares de los detenidos que aún continúan presos en El Helicoide.
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