Niño Jesús, estaba pensando escribirte una carta, pero creo que podrías ofenderte por lo largo del texto y, además con lo ocupado que debes estar en estas fechas, no tendrás mucho tiempo para leerla. De allí, que inspirado en la vintage canción de Luis Aguilé, decidí invitarte a mi casa a cenar esta Noche Buena, y poder de manera verbal, delicada, e implorativa, exponerte todas las necesidades de esta amada y vapuleada patria mía.

Respecto al billete

El Gobierno Nacional, con una habilidad sorprendente para mantener el precio del dólar bajo, ha logrado una apreciación del bolívar de 17% desde el primero de diciembre hasta hoy. Esto, no obstante estimamos una expansión monetaria  mayor del 30% al cierre del mes, para poder cubrir los huecos de gastos derivados de las utilidades de los 3 millones de empleados públicos, CLAP, perniles (bueno o malos), juguetes y toda suerte de circo populista navideño, propio de Nicolás y de todos los gobiernos de los últimos 60 años en Venezuela.

No obstante, no podemos tapar con un dedo, que el dólar inició este año en 75.000 y cerrará en torno a 1 millón. Esto implica una devaluación cercana a 1400% durante 2020.

Con todos los artilugios del BCV para contener el precio del dólar, la realidad es que el salario mínimo, puede tasarse hoy en 4,5 dólares mensuales, y más de 10 millones de venezolanos, incluyendo nuestros 1,8 millones de jubilados, cuenta con esa ínfima cantidad como ingreso mensual por familia. 4,5 dólares es el precio de una caja de medicamentos para el dolor de barriga, o un mal pellizco de la canasta alimentaria que se acerca a los 300 dólares por mes.

Por otra parte, la inflación alimentaria, debe cerrar diciembre en un 50%, con una inflación acumulada a lo largo del año, según nuestro departamento de estudios económicos, que superará el 4500%.

¿Qué te pedimos niño Jesús?, que por favor pares ya la devaluación y la inflación en Venezuela, que el aparato productivo se active y que se adecenten los salarios para que nuestra gente pueda acceder a su comida y las cosas más básicas. Sabemos que es mucho pedir, pero estamos hablando de un regalo para que el 75% de los venezolanos puedan sobrevivir a la ineptitud del gobierno, y a la falta de sindéresis de los gringos, que encima de todo, nos ponen sanciones y bloqueos económicos, para aumentar la peladera.

¿Y más allá del billete?

Sabemos, que tu papá, Dios Todopoderoso, tu mamá la Virgencita, el Espíritu Santo y toda la corte de Santos, Ángeles y Arcángeles, nos ha protegido de la pandemia.  Al ser Venezuela un país aislado, con pocos vuelos y rutas internacionales, además de no tener combustible, y sí, algunas medidas sanitarias acertadas del gobierno; hemos estado confinados en una cuarentena forzada.

Lo que te cuento, ha hecho que tengamos una baja tasa de contagiosidad por COVID, una de las más bajas del mundo. Además, estos últimos meses  la curva de la pandemia se logró aplanar, con una tasa de nuevos casos semanales menor del 2%, un número de casos de 0,4% per cápita, y de muertes de 0,03% per cápita. Esto nos coloca al mismo nivel de la República Democrática del Congo y de Sudán, así como de países en mejores condiciones como Australia y Japón.

Por lo que cuento, ante todo te agradecemos, y después te pedimos que nos dejes como estamos, y que no permitas, niño Jesús, que la maluca nueva cepa británica, pueda entrar a la Venezuela. Presta especial atención a eso, por favor, mira que Maduro dice que los colombianos tienen un laboratorio perverso para mandarnos la cepa inglesa, vía Londres-Bogotá-Cúcuta-Venezuela. Así que mosca con Duque y los colombianos, mira Duque no quiere a Maduro y pueden “echarnos una vaina”.

Asimismo, si no es mucho abuso, te pedimos que nos lleguen las vacunas y podamos inmunizar a todos los venezolanos, pero con “bichas” que realmente sirvan. Mira que las vacunas rusas, no sabemos si nos van a inocular también amor a Lenin, Stalin, Putin y todos esos demonios. ¡Dios nos ampare!

Sino es mucho abuso, también te pedimos niño salvador, que nos concedas un poco más de agua, electricidad, gas y combustible. Con eso nos alcanza, solo un poco más de servicios básicos, a ver si podemos comenzar a bañarnos sin totuma, dejar de usar tanta vela para iluminar las casas –y así las dedicamos a la devoción–, y dejar de destruir el ecosistema para conseguir leña que sustituya el gas doméstico.

Lo de la gasolina quizás es mucho pedir, pero por favor, deja que los tanqueros iraníes lleguen a nuestras costas y nos suplan de combustible. Sabemos que los iraníes no son bien portados, pero todos somos hijos de tu papá, Dios, así que haznos esa caridad.

¿Y de los políticos y la política?

En este punto, si es verdad que ya estamos abusando de ti, mi niño Jesús. Lo que te pedimos es sentido común, racionalidad, amor por la patria y a los venezolanos por parte de nuestros dirigentes.

Ante todo, que Guaidó y la oposición radical, se dejen de pendejadas (disculpa la grosería por favor), y no frieguen más la paciencia, promoviendo la existencia de 2 gobiernos, el de Guaidó y su mentor Leopoldo, que suscribe la mitad del mundo, y el otro, el de Maduro y su combo, que respalda la otra mitad. Por favor, concédenos la gracia de tener un solo gobierno.

Te pedimos además, ya en calidad de milagro, que el oficialismo y la oposición lleguen a acuerdos de gobernabilidad, en virtud de los cuales, la agenda ante todo sea orientada la resolución de la crisis económica y humanitaria, dejando de lado sus preocupaciones políticas, sobre quién ostenta y ostentará el poder.

Ya por último, te pedimos que Biden y su nuevo gobierno, aligere las sanciones  financieras y comerciales que estrangulan a Venezuela y a los venezolanos, y que se metan en sus asuntos y nos dejen a los venezolanos quieticos, porque en ese empeño que tienen de sacar a Maduro, nos ponen a pasar hambre a todo el mundo, no a Maduro y a su gente, que están bien gorditos, por cierto.

Ya como un abuso, de último, te pedimos que NO repitas el milagro de resurrección ni con Maradona, ni con José Vicente, por caridad, te lo pedimos. Déjalos más bien allá arriba en el cielo, como arcángeles chavistas –sí, aunque estén un poco maltrechos–  a ver si iluminan al presidente y los demás oficialistas para encontrar salidas económicas y políticas a la crisis que nos está matando como país.

Disculpa tanta pedidera y tanto abuso niño Jesús, de verdad que te he pedido demasiadas cosas, pero es que hay un berenjenal de problemas en esta nuestra amada Venezuela.

¡Feliz Navidad y gracias por venir a mi casa!

***

Las opiniones expresadas en esta sección son de entera responsabilidad de sus autores.

Del mismo autor: ¿Y tú qué piensas de las sanciones?