Por segunda vez, el preso político Vasco Da Costa vive un motín carcelario. A las 10:30 am llamó a su hermana Anita Da Costa para informarle la situación: los reos del Centro para Procesados 26 de Julio, en la capital del estado Guárico, se alzaron. Ese es su lugar de residencia desde el 13 de mayo de 2015.

“Los presos piden traslados”, es lo que alcanzó a decir el politólogo detenido, según comentó Anita a Efecto Cocuyo, y agregó que a las 2:30 de la tarde, el hermano la volvió a llamar para informarle que había sido secuestrado. Además se encontrarían como rehenes el jefe de Disciplina Penitenciaria, dos custodios y dos encargados de Deportes.

“Se escuchaban gritos y detonaciones. Ese lugar es un infierno y lo que quieren es ser trasladados de allí”, manifestó la hermana de Da Costa.

El 28 de diciembre del año pasado, otra situación violenta se registró en el penal en el que murieron tres personas: María Alejandra Lugo Belisario de 26 años de edad y el custodio Leonardo Chacín Bernal (21 años), al igual que un privado de libertad, sin identificar. También se conoció que al menos 30 personas quedaron lesionadas.

En ese motín detonaron una granada, por lo que funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) intervinieron el recinto carcelario. Con perdigones, fue herido Vasco Da Costa en aquella oportunidad, al igual que Lugo Belisario, quien falleció en esa revuetla.

“Estamos muy angustiados por lo que le pasó hace menos de tres meses”, manifestó la hermana.

Aislamiento

Desde que Vasco Da Costa llegó al recinto carcelario permanece en una celda de aislamiento. Sus parientes solo tienen acceso a él dos veces al mes, al igual que le permiten el mismo número de llamadas telefónicas en ese periodo.

La hermana de Da Costa dijo que desde el 4 de enero el director del penal, Antony Domínguez, le tiene restringida la comunicación al politólogo. “Dice que él está castigado por ser un ser diabólico y tener una mente perversa. Esa fue la razón que nos dio”, explicó la familiar.

Da Costa fue detenido el 24 de julio de 2014 por ser “quien viene diseñando planes de colocar explosivos en varias partes de la ciudad”. Después de 23 audiencias diferidas, el 13 de mayo de 2015 lo imputaron y privaron de libertad por asociación para delinquir, agavillamiento e instigación a la violencia. Su juicio está pautado para el 1 de marzo de este año.

¿Por qué piden traslados?

Anita Da Costa indicó que el Centro para Procesados 26 de Julio en San Juan de los Morros fue construido en los galpones de un supermercado. Dentro, crearon celdas que tienen de techo unas rejillas, no tienen ventanas y en cada una hay una letrina que es un hueco en el suelo.

“Es un lugar a media penumbra y, según nos comentan, da la sensación de estar en una alcantarilla, pues los custodios pueden caminar por encima de las celdas. Huele a cemento mezclado con orina”, manifestó la mujer.

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