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101 muertes en sólo 22 días. Los reportes de la Comisión Presidencial de COVID-19 de la administración de Nicolás Maduro revelaron que a pocos días de finalizar el 2020 no sólo se superó el hito de más de mil venezolanos fallecidos por esta nueva cepa de coronavirus, sino que se acelera el ritmo de mortalidad a los similares a los de octubre.

Los anteriores 100 fallecidos se reportaron en 30 días, desde el 1° de noviembre al 1° de diciembre.

La primera centena de decesos tomó 124 días y las siguientes 102 muertes se reportaron en 22 días. Más tarde se redujo a 13 días cuando se reportaron oficialmente 101 muertes entre el 7 y el 19 de agosto. Las 402 se superaron en 14 días, las 503 en 12 mientras que las 601 en tan sólo 11 días. Se llegó a 705 muertes y luego alas 809 en sólo 16 días.

Luego 97 muertes en los 20 días comprendidos entre el 13 de septiembre y el 1° de noviembre y, como se dijo, cien en treinta días.

Así que el promedio de muertes por día sube de 3,33 a 4,6. Esto equivale a casi 40% más fallecidos por día.

Hay que acotar que en la base de datos de Efecto Cocuyo hay 1.003 fallecidos, ya que en el reporte brindado por la vicepresidenta Delcy Rodríguez el 10 de septiembre, aunque anunciaron datos para nueve fallecidos, en el conteo oficial sólo se sumaron ocho.

Mortalidad a ciegas

En los últimos 101 decesos continuó sin informarse sobre la condición de salud previa y profesión. En apenas cuatro se dijo también los municipios pero en ocho casos ni siquiera se dio sexo o edad. Se trató de los reportes del 5 y del 13 de diciembre.

Resumen de hallazgos

• Contagios entre mujeres siguen subiendo, oscilan entre 44% y 44,9% según la fuente.
• La mortalidad también muestra incremento entre las mujeres. Subieron de 31,6% a 31,7% de víctimas con sexo reportado
• Los casos sin sexo subieron 17,7% al pasar de45 a 53. Ya son 5,3%, similar a uno de cada 18 fallecidos
• Promedio de fallecidas es 66,3 años. El de hombres es de 61,4 años. Subió 0,5 años la de ellas y quedó igual la de ellos. En total, el promedio, incluyendo los casos sin sexo especificado, es de 62,9 años. Esto es 0,1 años más que el reporte anterior.
• Son féminas las víctimas de mayor y menor edad: el 13 de noviembre murió una niña de 3 años en Barinas mientras falleció una señora de 96 años el 23 de octubre, en Táchira.
• En Vargas sólo han fallecido mujeres, seis.
• En Mérida, 37,33% de decesos son mujeres y en Anzoátegui 34,5%, mientras en Táchira y Carabobo están las tasas más bajas con 23,6 % y 14,3% de muertes.
• Han fallecido sólo 0,62 % de mujeres contagiadas y 1,04 % de los hombres.
• Yaracuy acumuló 21 nuevas muertes llegando a un total de 24.
• Tasa de letalidad más alta: Amazonas con 3,63%, seguidos de Mérida y Sucre con 2,31 % y 2,24%. La más baja en Portuguesa y Monagas con 0,2 % y 0,1 % respectivamente.
• Zulia acumula 84 hombres, 38 mujeres y cinco sin dato de sexo. Su promedio de edad es entre cinco y siete años menor al nacional según sean hombres o mujeres.
• Yaracuy y Lara fueron los que más subieron en muertes con 700 % y 53,3 % de aumento, respectivamente.
• Sólo se conoce el estado de salud previa de 138 personas (15,3 %) y la profesión de 177 (19,6 %).
• 275 muertes están en el rango de entre 60 a 69 años, un 29,5% de los casos.

Sigue descendiendo la mayoría masculina

Para este análisis de nuevo se usaron los datos oficiales de la Comisión Presidencial para el COVID-19 de la administración de Maduro, así como las progresiones detalladas de los casos y fallecidos del Centro de Estudios del Desarrollo (Cendes) de la Universidad Central de Venezuela.

Este último informe identifica diferencias entre el conteo por género y por casos publicados en el Sistema Patria.

Así que con 111.024 casos, el Sistema Patria reporta que 61.840 son hombres, lo que arroja una tasa de masculinidad de 55,7%, bajando desde el 56% del 1° de diciembre. Por otro lado, el Cendes reporta 62.626 hombres, lo que arrojaría una proporción de 56,4%, subiendo desde el 55,1% anterior.

De las 1.003 casos de fallecidos, 649 son hombres y 301 mujeres, mientras que los pacientes sin sexo especificado siguen en 53. Así que los hombres bajaron de 68,4 % a 68,3 % entre los casos con datos sobre sexo mientras las mujeres subieron entonces de 31,6 % a 31,7 %.

La letalidad masculina está entonces entre 1,04% y 1,05% mientras la femenina oscilaría entre 0,62% y 0,63%.

Edad de mujeres vuelve a subir

Las mujeres que han fallecido promedian una edad de 66,3 años, subiendo otros seis meses desde los 65,8 años del corte anterior con 902 muertes.

El 13 de noviembre se reportó la primera fallecida menor de 30 años. Una niña de tres años de Barinas. Es además la persona más joven en morir de COVID-19 en Venezuela. Una mujer de 24 años de Monagas fue reportada el 12 de diciembre. Así que hay dos muertes en menores de 30.

Sigue habiendo seis fallecidas entre los 30 y 39 años, subió de 28 a 30 entre los 40 y 49 años y de 43 a 45 en la quinta década de vida.

La mayoría sigue en las sexagenarias con 91 decesos después de sumar de nuevo ocho muertes más. Entre los 70 y 79 años ahora tienen 76 casos con nueve más. Las mayores de 80 sumaron también ocho para llegar a 50.

Hay un solo caso de una mujer fallecida sin edad detallada.

Por estado se ubican en Zulia 38, Miranda 35, Táchira y Mérida 30, Apure 27, Distrito Capital 26, Lara 15, Aragua 14, Sucre 13, Anzoátegui 10, Amazonas nueve, Yaracuy siete, Vargas, Trujillo y Barinas seis, Nueva Esparta, Guárico y Carabobo cinco, Monagas cuatro, Falcón, Cojedes y Bolívar tres, y finalmente Delta Amacuro una.

Si se consideran sólo las últimas 30 reportadas, las fallecidas se reportaron en la siguiente forma: Lara ocho, Yaracuy cinco, Miranda cuatro, Táchira tres, Mérida y Apure dos, con una cada una en Zulia, Trujillo, Nueva Esparta, Monagas, Guárico y Bolívar.

En Mérida, 37,04% de decesos son mujeres con 30 de 81 mientras en Miranda es 33,65% con 35 de 104. Por el contrario, en Táchira y Carabobo se registran las menores tasas, con 23,6 % y 14,3 %.

Baja edad de los hombres

El promedio de edad de los hombres fallecidos continúa en 61,4 años, un ligero aumento de 0,1 al contrario de los tres reportes anteriores. Por grupos etarios, hay 12 menores de 30 años, ahora hay 34 entre los 30 y 39 años, 74 fallecidos entre los 40 y 49 años, hay 143 en la década de los cincuenta y 184 entre los sexagenarios, donde se concentra la mayoría de muertes masculinas.

Hay además 124 entre 70 y 79 años, y finalmente 60 decesos entre 80 años o más, con tres hombres de 91 años como los más longevos.

A diferencia de las mujeres, hay 18 casos de hombres sin edad.

Por entidad los fallecidos se distribuyen así: Táchira 92, Zulia 84, Miranda 64, Distrito Capital 63, Apure 52, Mérida 46, Aragua 36, Sucre 33, Lara 31, Carabobo 27, Anzoátegui 19, Amazonas 16, Yaracuy y Nueva Esparta 15, Trujillo 14, Falcón y Bolívar ocho, Guárico siete, Barinas seis, Monagas cinco, Portuguesa, Delta Amacuro y Cojedes dos.

Si se consideran sólo los últimos 63 hombres fallecidos, las entidades con más nuevos casos fallecidos son: Yaracuy 14, Táchira 11, Zulia 10, Lara ocho, Miranda siete, Mérida tres, Trujillo y Barinas dos, y finalmente Portuguesa, Guárico, Distrito Capital, Carabobo, Apure y Anzoátegui uno en cada entidad.

Hay dos casos de hombres sin estado detallado.

Letalidad y mortalidad

Si se compara el número de muertes con los casos encontrados se obtiene la tasa de letalidad. Esta subió a 0,9%. Un aumento desde la tasa de 0,88 % de hace tres semanas. Esto debido a un alza en la mortalidad reciente de 1,2% correspondiente a comparar 101 muertes con 8.403 casos reportados.

Por su parte, la tasa de mortalidad, que compara los fallecidos con la población, es de 35,16 muertes por millón de habitantes, al considerar una población de 28,5 millones de personas en Venezuela, como señala la Encovi 2019-2020. Con 902 muertes se ubicaba en 31,76 muertes por millón.

Sin embargo, el diputado y médico José Manuel Olivares ha señalado que el monitoreo que realiza junto a su equipo brindaba la cantidad de 1.614 fallecidos por COVID-19 hasta el 27 de octubre, cuando oficialmente se contaban 780 muertes. Desde entonces no ha actualizado la cifra.

Ese día la tasa de letalidad extraoficial se ubicaría entonces 1,78%, pues se acumulaban 90.400 casos. Era más del doble de la oficial.

Ahora, si se suman las 834 muertes no anunciadas hasta ese día, entonces para el 23 de diciembre habría un total de 1.837 muertes. Lo que resultaría en una letalidad extraoficial de 0,9% con 111.024 casos, la misma que la oficial, por la falta de actualización.

De acuerdo con el siguiente gráfico generado por Our World In Data, se puede observar que es la única curva que no oscila por el aumento de casos o cambios de metodología es la de Venezuela.

Esto implicaría que tendríamos la misma mortalidad de Uruguay (con hasta el momento el mejor caso de éxito en la región), lejos de Surinam y Paraguay con 2,1 %.

Vale comparar el 0,9% oficial con países vecinos con similar cantidad de casos como Honduras y Guatemala. En el primero de los dos mencionados el 23 de diciembre registraba 3.054 muertes en 118.036 casos y el segundo 4.749 muertes en 134.894 casos. Letalidades de 2,59% y 3,52%, respectivamente. De forma similar en los fronterizos Brasil y Colombia se reportan tasa de letalidad de 2,7 % y 2,6% respectivamente.

Amazonas y Apure lideran en letalidad y mortalidad

Al poner la lupa en la mortalidad y letalidad dentro de Venezuela, se encuentra que en Amazonas está la mayor letalidad del país con 3,63 % de los casos detectados, al sumar 28 muertes en 771 casos detectados. Es seguido de Mérida con 2,31 % y Sucre con 2,24 %.

Los más bajos en letalidad son Bolívar con 0,3 %, Portuguesa 0,2 % y Vargas 0,1 %. Con 21 muertes, Yaracuy abandonó este ranking que lideró por nueve meses. Ahora registra 0,43% debido a que también registra un aumento de casi 20% de casos en últimas cuatro semanas.

Vale resaltar que el estado Vargas es el que posee la tasa de contagio por población más alta del país con 17,5 casos por cada mil habitantes, lo que equivale a un contagio cada 57 habitantes pero se registran sólo seis muertes.

Por otro lado, si se considera la mortalidad, que compara el número de muertes según la población, el liderazgo sigue ahora es ocupado por Amazonas, con 181,2 muertes por cada millón de habitantes (1,8 por cada diez mil personas). Le sigue Apure con 177,5 muertes por millón. Táchira ocupa el tercer lugar con 107,1 muertes por millón

Le siguen Mérida con 91,5 muertes por millón de habitantes y Sucre con 49,4.

Las entidades que tienen menos fallecidos con respecto a quienes lo habitan son lideradas por Portuguesa con 2,2 muertes por cada millón de personas. Le siguen Bolívar con 6,8 y Monagas con 10.

Yaracuy también abandonó por primera vez este ranking, teniendo ahora 38,1 muertes por millón.

Las últimas 101 muertes se distribuyen de la siguiente forma Yaracuy 21, Táchira 17, Lara 16, Zulia y Miranda 12, Mérida seis, Trujillo y Apure tres, Guárico y Barinas dos, Portuguesa, Nueva Esparta, Monagas, Distrito Capital, Carabobo, Bolívar y Anzoátegui.

En el Zulia mueren a menor edad

Con más de 3,7 millones de habitantes en su territorio (sometido a cambios por migración interna y externa), el Zulia no exhibe altas tasa de mortalidad o letalidad, pero sus 127 pacientes fallecidos lo deja de nuevo a la cabeza de la lista, aunque ahora compartiendo con Táchira.

Zulia tiene 38 mujeres, 84 hombres y cinco de quienes no se informó el sexo de los casos.

El Zulia tiene ahora 12,66 % de los fallecidos del país aunque hace tres semanas tenía 12,75 %. Exhibe una letalidad de 1,25% de los casos reportados  (más alta que el país) y 33,6 muertes por millón de personas (menos que la tasa nacional).

Entre los fallecidos hombres en Zulia el promedio de edad es de 55,5. Esto es 5,9 años menos que el promedio nacional masculino.

Del total, 30 vivían en Maracaibo, cuatro en San Francisco, dos en Cañada de Urdaneta y uno en Rosario de Perijá, Francisco Pulgar, Colón y Lagunillas; mientras que se desconoce la ubicación de 48 de los 84 casos.

Como no se dieron datos profesionales de los últimos 101 decesos, en el Zulia se siguen contando nueve comerciantes y dos informales, un trabajador de empresa petrolera y dos independientes, un técnico químico y uno aeronáutico, tres médicos y un “profesional de la salud”, un efectivo militar y dos funcionarios públicos.

También un jubilado, un zapatero, un cocinero, así como dos obreros, un transportista de carga pesada, un educador jubilado y un pescador. Se desconoce el oficio de 53 hombres.

Para las zulianas la edad promedio entre las fallecidas es de 58,9 años,  una diferencial sustancial de 6,4 años menos que el promedio nacional femenino.

De nuevo, sin datos salvo la edad para las últimas mujeres fallecidas, se mantiene que 12 eran de Maracaibo y una en cada una de estas localidades: San Francisco, Cabimas, Lossada, Semprún y Mara. Ya son 17 casos sin municipio de 38 fallecidas. Entre los oficios se puede ubicar a cuatro comerciantes, tres amas de casa, una docente y una médica jubilada, pero se desconocen datos profesionales de 27.

Yaracuy y Lara los que más aumentaron

El primero lideró el aumento al disparar las muertes de tres a 24, un aumento de 700%.

Por su parte, Lara subió 53,3% al pasar de 30 a 46 decesos.

Destaca Táchira, que alcanzó las 127 muertes de Zulia, con 15,5% de aumento.

El más bajo fue ahora Distrito Capital con una única muerte, un aumento apenas de 1,1% porque tenía 91. Le siguen Carabobo con 2,9% y Anzoátegui 3,4%.

Sólo el Territorio Insular Miranda -antiguas Dependencias Federales- se mantiene oficialmente libre de fallecidos.

Del resto, en Zulia y Táchira 127, Miranda 104, Distrito Capital 92, Apure 90, Mérida 81, Aragua 51, Sucre 47, Lara 46, Carabobo 35, Anzoátegui 30, Amazonas 28, Yaracuy 24, Trujillo 21,Nueva Esparta 20,Guárico 15,Barinas 12, Falcón y Bolívar 11, Monagas nueve, Cojedes ocho, Vargas seis, Delta Amacuro tres y Portuguesa dos.

También hay tres víctimas de las que no se conoce su ubicación: el caso del 5 de julio que fue incluido a última hora por la vicepresidenta Delcy Rodríguez, aunque Nicolás Maduro no la había contabilizado y del que no se tiene ningún dato, un hombre el pasado 9 de junio y otro hombre de 67 años del 20 de abril.

Apenas sabemos de salud y profesiones

Desde el 5 de agosto prácticamente se abandonó la entrega de datos de comorbilidad en los reportes diarios. También conocida como “morbilidad asociada”, es un término utilizado para describir dos o más trastornos o enfermedades que ocurren en la misma persona y que aumentan la posibilidad de fallecer por COVID-19.

En la base de datos elaborada por Efecto Cocuyo hay sólo 138 casos en los cuales se especificaron detalles sobre el estado de salud previa de las personas.

Así que ahora se tiene información de salud de apenas 13,75 % de los casos aunque se ubicaba en 62% el 15 de julio, cuando había sólo cien fallecidos.

Los casos con hipertensión arterial siguen en 85 personas y con diabetes suben así a 46. Las personas con problemas de exceso de peso siguen en 21. Así mismo, si los fallecidos se clasifican por quienes tenían condiciones previas, 82 poseían una, incluyendo una embarazada; 34 tenían dos patologías recurrentes y 32 tenían tres o más comorbilidades.

Si se consideran sólo los casos con datos sobre su condición antes de contagiarse, entonces 61,6% tenían hipertensión; 33,3% diabetes y 15,2% sobrepeso; además, 59,4% tenían una condición, 24,6% tenían dos condiciones previas y 23,2% acumulaban tres o más, con apenas 0,73% que tenía buena salud.

Como se desconoce la condición de salud de 86,25% de los casos, no es posible hacer ninguna inferencia aunque se puede ver que la mayoría de muertes están en personas con una sola condición preexistente, lo que va contra lo encontrado en el resto del mundo.

Casos sin ocupación laboral

Algo similar sucede con las profesiones. Se conocen la ocupación laboral de sólo 177 casos, aunque siguen destacando los comerciantes con 39 casos. Entre el personal del sector salud que se ha oficializado, se encuentran 15 médicos y una médica jubilada, un enfermero y cuatro enfermeras, así como cuatro personas descritas como “trabajador de salud”, pero también hay un administrador de un centro de salud de 56 años que vivía en Catia y un supervisor de cadenas de farmacias.

La base de datos de Efecto Cocuyo contabiliza, desde el primer caso que se reportó el pasado 16 de junio y hasta el 22 de diciembre, se registran 235 miembros del personal sanitario venezolano fallecidos. Están distribuidos en 191 médicos (142 hombres y 49 mujeres), 33 de enfermería (22 mujeres y 11 hombres), ocho trabajadores de la salud, dos odontólogos y un biomédico.

Sin embargo, la ONG Médicos Unidos de Venezuela tiene una lista de 292 fallecidos hasta el 22 de diciembre.

Resaltan además 25 amas de casa, 20 “trabajadores independientes”, 12 jubilados y pensionados así como siete efectivos militares. Sin embargo, el COVID-19 no hace distinción laboral porque también hay siete docentes, cinco funcionarios públicos, tres carpinteros, tres pescadores, tres transportistas, tres comerciantes informales, tres agricultores y tres vigilantes así como un gerente de gimnasio, un empresario, dos abogados, un productor audiovisual y dos obreros, entre otros.

Se desconoce el oficio o profesión de 826 personas, así que aunque comerciantes, amas de casa y personal de salud son mayoría, tampoco pueden hacerse inferencias debido a que no hay datos del 82,4% de los fallecimientos.

Siguen subiendo muertes en mayores de 70

Sólo dos niños han fallecido en Venezuela por COVID-19. Un infante de 3 años de Lara que tenía una válvula cardíaca e hidrocefalia. Su caso fue anunciado por la gobernadora Carmen Meléndez el pasado 1 de junio y luego oficializado por Maduro esa noche en el reporte diario de la Comisión Presidencial. Vivía en Carora, municipio Torres. Y una niña de tres años que falleció en el municipio Alberto Arvelo Torrealba del estado Barinas el 13 de noviembre.

Por grupos de edades, ahora hay 14 fallecidos menores de 30 años y 40 entre los 30 y 39 años; 104 entre los 40 y 49 años; 188 entre los 50 y 59 años; 275 entre los 60 y 69 años, otros 200 entre los 70 y 79 años y finalmente 110 muertes en mayores de 80 años.

En 72 casos no se precisó la edad de la persona.

El crecimiento por grupos etarios fue así: entre los 3 a 29 años, de 12 a 14 decesos, una subida de 16,7 %. Entre los de 40 a 49 años pasó de 94 a 104, un 10,6 % más, para los de 50 años se pasó de 178 a 188, lo que es 5,6 % más y en los sexagenarios de 252 a 275, por tanto, 10,7 % más. Para los septuagenarios pasó de 177 a 200, una subida de 11,5 %. En mayores de 80 subió de 95 a 110 personas, una subida de 15,8%.

Para los treintones fue de 34 a 40, es decir, 17,5%, las más alta subida.

Cuando Venezuela tenía 100 muertes el promedio de edad entre los fallecidos era de 60,1 años. Con 151 muertes el promedio bajó a 59,6 años y con 202 se coloca en 59,9 años, debido a que las últimas 51 muertes muestran un promedio de 60,9 años. Con 303 fallecidos, el promedio subió a 60,4 años, consecuente a los seis meses que subieron tanto hombres como mujeres.

Al llegar a las 402 muertes, el promedio se ubicó en 61,1 años, con 503 muertes se elevó a 61,6 años y subió a 61,9 años a las 601 muertes. Volvió a subir a 62,5 al llegar a 705 decesos. Se elevó a 62,7 años con 802 muertes y subió a 62,8 para las 902.

Sube ahora a 62,9 años.

Siguen bajando muertes entre 50 y 59 años

Entre quienes están en este grupo etario, han pasado de 32 casos -la mitad de los casos con edad conocida- al llegar a las primeras 100 muertes a ser ahora 18,7%.

Venezuela registra 62,8% de muertes de los 60 años en adelante, exceptuando los 72 casos sin edad.