Jorge Díaz* ha sido víctima de estafas en varias ocasiones en el restaurante que dirige dentro de un hotel en Caracas. Es parte de un fenómeno que proliferó en los últimos meses, en medio del proceso de dolarización informal que vive el país. Se trata de las transacciones con billetes falsos de dólares.

“Perdona, ahora no puedo confiar en nadie y debo revisar cualquier billete que me den”, comentó el señor Díaz mientras recibía divisas en efectivo como pago. En el local, según explicó, han recibido piezas de dólares falsas sin poder reconocerlas previamente. Ahora, como consecuencia de ello, cuentan con marcadores y máquinas de infrarrojo para detectarlos.

Caso similar le ocurrió a Marta Rodríguez*. Compró 100 dólares y meses después, cuando se disponía a realizar una operación, tuvo la sorpresa de que el billete que le habían entregado era falso.

Cada billete de dólar tiene distintos elementos de seguridad con los cuales puede identificarse la validez de la pieza, según la Reserva Federal (banco central de los Estados Unidos). El Programa de Educación sobre la Moneda de EEUU (CEP, por sus siglas en inglés) precisa numerosas recomendaciones que van desde la textura y color hasta el material de elaboración del papel.

A continuación las maneras de identificar las piezas falsas:

Textura y fabricación del billete

El papel con el que se fabrican los dólares está compuesto de un cuarto de lino y tres cuartos de algodón. Ello hace que su textura contenga relieves y sea rugoso en las esquinas, producto de los cortes. Además, posee fibras de seguridad de color rojo y azul distribuidas por toda la pieza; éstas están incrustadas en el papel moneda y no impresas sobre él.

Cuando se trata de billetes falsos, el papel que se usa es de menor calidad. Incluso, el color puede desprenderse con apenas el roce de un dedo.

Calidad del color e impresión

Existen importantes diferencias en la resolución de los billetes. Principalmente hay detalles en el retrato del prócer, que aparece más borroso y oscuro en las denominaciones falsas.

También hay divergencias en los sellos de la Reserva Federal y del Departamento del Tesoro. Por ejemplo, las marcas falsificadas pueden ser irregulares o poco nítidas.

Otra manera de diferenciar las denominaciones falsas de las reales está en las líneas de margen de los billetes. En las piezas alteradas suelen ser más opacas.

Rasgos distintivos frente a la luz

A simple vista no se aprecian, pero al colocar el billete frente a la luz se revelan rasgos distintivos. En el billete de $5, por ejemplo, aparecen números cinco de diferentes tamaños a lo largo de la pieza.

En otras piezas, como el de $100, se aprecian marcas de agua similares al retrato. Igualmente se revelan tiras verticales incrustadas en el papel, y revelan la denominación del billete.

Número de serie

Las notas poseen una combinación de once números y letras en el frente de la pieza, que además es distintivo de cada uno. Estos números tienen un estilo distintivo, espaciado uniformemente y están impresos con el mismo color de tinta que el sello del Departamento del Tesoro.

En las falsificaciones, los números pueden diferir en color o tono de tinta con el sello del Tesoro y pueden no estar alineados.

*Nombres alterados a petición de los entrevistados

Foto principal: Iván Reyes

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