El sarampión sigue activo en Venezuela
Los casos de sarampión se siguen presentando en Venezuela, según el último reporte de la Organización Panamericana de la Salud (OPS)

Desde la última semana de junio de 2017 hasta la segunda semana de diciembre de 2019, Venezuela notificó a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) 11.181 casos sospechosos de sarampión, de los cuales 1.869 se registraron este 2019, de acuerdo con la última actualización epidemiológica sobre sarampión.

Este año, de acuerdo con el boletín divulgado este 13 de diciembre, se confirmaron 552 casos. El estado con más registros de la enfermedad fue Zulia, con 364 casos y dos de las 18 defunciones que sucedieron en la región latinoamericana. La segunda entidad venezolana con más notificaciones de sarampión fue Anzoátegui, con 145.

Los otros estados donde se presentó la enfermedad fueron Carabobo (17), Monagas (4), Distrito Capital (7), Miranda (4) y Nueva Esparta (3). Cojedes y Yaracuy tuvieron dos reportes, mientras que Amazonas, Aragua, Bolívar y Sucre registraron uno, respectivamente.

“La tasa promedio de incidencia acumulada 2017-2019 en el país es de 22,2 casos por 100.000 habitantes“, expresa el organismo en el texto. La mayor tasa de incidencia se registró en Delta Amacuro: 215 casos por cada 100.000 habitantes. Distrito Capital quedó de segundo con 127 casos por 100.000 habitantes y Amazonas de tercero con 85 casos por 100.000 habitantes.

Desde la anterior actualización epidemiológica se registraron 32 casos nuevos en el país, mientras que en toda la región hubo un aumento de 37,6% de casos confirmados.

Cuatro comunidades indígenas han registrado un total de 139 pacientes con sarampión en Venezuela, según la OPS. Todas están en el estado Zulia. Las etnias Yukpa y Putumayo tuvieron dos casos cada una, mientras que los Añú tuvieron 50. La etnia Wayúu registró 85 casos.

En 2018, Brasil y Venezuela concentraron la mayor cantidad de casos: 62 % y 34 %, respectivamente. Este 2019, 85 % de los casos confirmados proviene de Brasil.

La OPS reitera a los Estados el llamado a aumentar la vigilancia epidemiológica y las coberturas de vacunación, además de identificar los flujos de migración y brindar una respuesta rápida ante los brotes de sarampión en la región.

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