El especialista en gobernabilidad y gerencia política, Jesús González, enumeró siete elementos prácticos para reconstruir el bloque opositor tras conocerse la reunión exploratoria que sostuvieron los jefes de cuatro partidos de oposición el pasado jueves 19 de julio.
“En esta etapa inicial de la reconstrucción del bloque, no se trata de convencer sino de buscar puntos en común para destrancar la situación de crisis que se viene acumulando”, señaló el politólogo.
1- Reglas claras
En todo proceso de negociación complejo se deben establecer reglas claras que contribuyan a:
– Mitigar la desconfianza entre las partes.
– Delimitar las expectativas que tienden a aumentar, especialmente en la población.
– Advertir que la crisis permanecerá durante el proceso e incluso pudiera agudizarse.
– Contribuir y velar por el cumplimiento de lo acordado.
2- Construir una estructura mínima
Esto implica entre otros aspectos los siguientes:
– Establecer un objetivo. Por ejemplo, pactar una serie de condiciones para ir a la elección de concejales, defender la AN y el referéndum de la Constitución, son coyunturas que deben ser abordadas pero el objetivo es: el cambio de gobierno de forma pacífica, democrática y electoral.
– Definir una agenda acotada y realista.
– Distinguir entre elementos sustantivos y procedimentales.
– Definir los representantes de cada parte.
– Establecer protocolos: lugar, periodicidad de los encuentros, instancias de decisión, apoyo técnico.
3- Construir confianza entre las partes y la población
– Establecer gestos concretos y condiciones mínimas, y al mismo tiempo diferenciarlos de los resultados del posible acuerdo.
– Cerciorarse de que esos gestos y condiciones se materialicen rápidamente y eso genere un efecto de avance y beneficio para la población.
– Suavizar el lenguaje, restarle toda radicalidad a lo interno de la oposición.
4- Para redactar los acuerdos mínimos
– Incorporar compromisos específicos y concretos.
– Identificar responsables y fechas para cumplir con cada uno de los compromisos.
– Designar en cada parte asesores técnicos como responsables del texto concertado.
5- Nombrar facilitadores
Estas figuras deben tener las siguientes funciones:
– Garantizar neutralidad entre las partes.
– Observar y monitorear el cumplimiento de las reglas establecidas.
– Apoyar en situación de crisis.
– Evitar pronunciamientos no concertados.
– Promover el apoyo al proceso y hablar de los beneficios que de él se desprenden.
6- La comunicación es esencial
– Acordar estrictas reglas de confidencialidad sobre discusiones internas, para evitar que los disensos trasciendan a la opinión pública y perjudiquen la construcción dela confianza.
– Diseñar una estrategia para emitir comunicados periódicos y conjuntos sobre los avances del proceso.
– Designar una oficina de comunicaciones
– Establecer estrategias de pedagogía sobre el proceso.
7- Incorporar a la sociedad civil
– Concebir un mecanismo formal de participación con un objetivo claro y que haga posible entregar propuestas a las partes.
– Crear un mecanismo formal para llamar expertos.
– Encontrar y aplicar un procedimiento para que los sectores no representados ejerzan su participación.
“Si bien el anuncio de la reunión es positivo, hace falta mucho más para que el proceso llegue a buen término; la complejidad de la crisis y los errores deben hacer reflexionar a la dirigencia y nunca está de más buscar los apoyos técnicos especializados que fortalezcan el incipiente proceso de reconstrucción opositora, pues la apuesta de la gran mayoría debe ser que este nuevo intento tenga éxito”, concluyó González.
Foto (imagen referencial): puntodecorte.com