¿Qué se puede comprar con la pensión en Venezuela?
¿Qué se puede comprar con la pensión en Venezuela?

El Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) realizó este martes, 21 de julio, el pago de la pensión correspondiente al mes de agosto: 400.000 bolívares.

El monto equivale a 1,7 dólares según la tasa oficial del Banco Central de Venezuela de este martes, y a $ 1,6 en el mercado paralelo.

El ente instó a que los 4.926.377 de pensionados que tiene el país, según cifras oficiales, usen los medios electrónicos de la banca. Esto, debido a que esta semana se debe aplicar la cuarentena radical en todo el territorio, de acuerdo al esquema 7+7.

El Seguro Social aseguró que, a través de este pago, “el Gobierno Bolivariano dignifica a las adultas y adultos mayores de la Patria”.

Pero, ¿para qué le alcanza esta mensualidad a los adultos mayores?

Josefina Gil, de 65 años de edad, contó que con la pensión pudo comprar un kilo de harina de maíz y una caja de pastillas para la tensión que trae 10 cápsulas.

Ella vive en El Cafetal con su hermano José, de 64 años y que tiene una discapacidad visual. “Él tiene que tomar una medicina que cuesta Bs. 1.800.000, la pensión no le alcanza para eso ni de broma y es su único ingreso”, dice.

De a uno o dos productos

A través de la red de contactos del Cocuyo WhatsApp, varios pensionados y familiares de pensionados relataron que con esa mensualidad solo pueden adquirir uno o dos productos en promedio.

De acuerdo con el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (CendasFVM), en mayo la canasta básica familiar superó los Bs. 100 millones. Estimaron que una familia requería de $ 600 dólares para adquirirla.

El señor Emilio Caraballo, también residente del municipio Baruta en el Área Metropolitana de Caracas, compartió que pudo adquirir medio kilo de café y tuvo que completar con Bs. 16.000.

El pensionado Edgar Silva señaló que solo pudo comprar “un pedazo” de queso y Milena Matos, residente de la parroquia caraqueña de Altagracia, relató que con la pensión de su esposo pagaron un medio cartón de huevos.

Josefina Soto, de 70 años, contó que pensaba comprarse un kilo de café que se consigue por su casa en la parroquia San José entre Bs. 350.000 y 390.000.

Sin embargo, lo que usualmente hace es acumular ese monto junto con la pensión de su esposo. Se considera afortunada porque recibe remesas que le envía una de sus hijas.

En el estado Miranda, Ángela Ayala pudo comprar una mantequilla porque completó Bs. 40.000 que le hacían falta. En La Guaira, Joan García, compartió que su mamá adquirió dos panes y un litro de leche.

Hablan en las regiones

En Maracay, estado Aragua, Victoria Silva mencionó que su abuela alcanzó a comprar un kilo de azúcar y un cuarto de kilo de café.

Lenny Bracho, residente de Valencia en el estado Carabobo, apoya a sus papás en las compras. Dice que sumó las dos pensiones y adquirió un kilo de queso y medio cartón de huevos.

En el estado Falcón, Alexis dijo que a su abuela la pensión le alcanzó para un paquete de harina de trigo en Bs. 200.000 y para Bs. 200.000 de queso que pidió en la charcutería.

Iraima Colina compartió que con los Bs. 400.000 que le transfirieron alcanzó a cancelar la renta de la telefonía fija, pero que no le alcanzó para su línea celular. “Es triste”, expresó.

En la ciudad de Barquisimeto, estado Lara, Pedro Briceño narró que compró un kilo de leche en polvo para tomar el café en las mañanas, pero costó Bs. 650.000 por lo que tuvo que pagar la diferencia.

La pensionada Sandra Betancourt uso la pensión para comprar un litro de aceite de soya en Bs. 350.000 y dos huevos.

Al oriente del país, en Nueva Esparta, Marithza Mora pudo adquirir un paquete de sopa de sobre y una cabeza de ajo.

Para el pasado mes de junio, de acuerdo con la Asamblea Nacional, la inflación fue de 19,5 % y la inflación interanual de 3.524%.

En el primer semestre del año, la inflación acumulada de Venezuela fue de 508,47 %.

Periodista egresada de la UCV. Estudiante del posgrado de periodismo de investigación del grupo editorial Perfil y la Universidad del Salvador en Argentina.