La escasez de billetes de alta denominación, un fenómeno causado por la inflación y por el comercio ilegal de bolívares en la frontera, obliga a la banca a aplicar operativos para mantener los cajeros electrónicos con suficiente efectivo para atender la demanda diaria.

De acuerdo a la Memoria y Cuenta de la Asociación Bancaria de Venezuela (ABV), 800.000 bolívares es la máxima capacidad de dinero con la que se puede cargar un cajero electrónico, pero el monto dura apenas unas ocho horas en promedio, lo que implica la “activación de operativos de recarga durante el día por parte de los bancos”, señala el gremio financiero en el documento.

Los banqueros recuerdan que existe una resolución del Banco Central de Venezuela (BCV) que les obliga a recibir un surtido de denominaciones de las que solo 30% representan billetes de 100 bolívares. Por ello, en varias oportunidades la ABV ha solicitado formalmente al instituto emisor que imprima billetes de más alta denominación para solucionar el problema de la carga y recarga de los cajeros.

El economista Pedro Palma aseguró durante una entrevista a Globovisión que son necesarios billetes de 500 y 1.000 bolívares para evitar la escasez de efectivo, pero que el gobierno se niega, aunque Venezuela vive una de las inflaciones más intensas del mundo. De hecho, calculó que para este año la subida de los precios estará en torno a 200%.

Agregó que la impresión de nuevos billetes facilitará las transacciones bancarias, aunque no cree que resuelva la fuga de efectivo por la frontera, para lo que se necesitaría el desmontaje de los controles de cambio y de precios que se aplican en Venezuela desde hace 12 años.

Bachaqueo de billetes

Palma destacó que a esa persona que, del lado colombiano está dispuesta a pagar 130 y hasta 140 bolívares por un billete de 100 bolívares es porque cruzar a Venezuela para comprar bienes básicos subsidiados que luego revende en el vecino país a un precio mucho mayor, le resulta un negocio con mucha rentabilidad.

Por su parte, el director de la firma Datanálisis, Luis Vicente León, consideró este lunes 17 de agosto que no tenía sentido someter a toda la población y a la banca a una crisis operativa, y que era necesario imprimir billetes de más valor.

El comercio ilegal de billetes en la frontera no es nuevo. Desde 2013 la ABV viene advirtiendo que hay una “altísima demanda del billete de la denominación de Bs. 100 y su escasez” que se concentra en toda la zona fronteriza, desde el estado Zulia hasta Amazonas.

De acuerdo a datos oficiales publicados recientemente por el diario Panorama, en lo que va de año las autoridades militares han incautado en Táchira y Zulia más de 10,3 millones de bolívares en billetes de alta denominación que tenían a Colombia como destino.

Pero Palma considera que el comercio ilegal de billetes no es la única causa de la escasez de efectivo. También lo es que la población necesita cada vez más dinero para comprar los mismos bienes debido a la inflación.

En general, los bancos han limitado a los clientes el retiro de dinero tanto de las agencias, como de los cajeros electrónicos, mientras que el BCV convocó una licitación para comprar papel moneda que les permita imprimir más billetes de 50 y 100 bolívares.

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