Foto: Ucab Guayana

Niños vulnerables, la necesidad de apoyo familiar, maltrato infantil y desigualdad en el municipio Caroní del estado Bolívar es lo que arrojó una investigación realizada por la Universidad Católica Andrés Bello extensión Guayana (Ucab Guayana) en alianza con Children’s Understanding of Well-being (CUWB).

Para llevar a cabo este trabajo, los investigadores del Centro de Estudios Regionales (CER) de la Ucab recopilaron los testimonios de 50 niños y niñas de diferentes estratos socioeconómicos, con edades entre 8 y 12 años de cuatro escuelas públicas y privadas del municipio.

Durante la presentación, realizada este 23 de abril, los especialistas advirtieron que se detectaron distintas formas de violencia en Caroní (intrafamiliar y en la escuela) «como experiencias comunes para todos los grupos del estudio».

También se registraron casos de niños que quedaron al cuidado de terceros a causa de la migración de sus padres o representantes.

La psicóloga Janet Guerra, especialista en desarrollo infantil, aseguró que “una de las grandes preocupaciones que encontramos es la exposición a la violencia y aspectos relacionados con la convivencia”.

«Por otra parte, el trabajo infantil es una realidad presente entre los niños de muy malas condiciones. El CER pudo identificar casos de niños que trabajan y estudian, lo que advierten puede tener un impacto negativo en su desarrollo educativo y bienestar general», apuntó la Ucab Guayana en una nota de prensa.

La crisis económica los impacta

La coordinadora del proyecto, Marian Ojeda, señaló que las escuelas ubicadas en zonas pobres enfrentan desafíos relacionados con la seguridad, la salud emocional y la estabilidad económica. De esta forma, la falta de recursos y las deficientes condiciones educativas afectan negativamente su percepción de bienestar.

«Para los niños con mejores condiciones, la preocupación por el dinero está relacionada con la seguridad y la estabilidad familiar, situación que dista de los niños con regulares y muy malas condiciones, a los que les inquieta la posibilidad de adquirir bienes, cubrir necesidades básicas e, incluso, su propia seguridad alimentaria. Necesitan dinero para comer«, publicó la Ucab Guayana.

Las fallas de infraestructura resulta un problema preocupante en los centros educativos en sectores vulnerables. Claudia Arismendi, directora general académica de la Ucab Guayana expresó que el mal estado de las instalaciones educativas y las fallas de los servicios son parte de la violencia estructural que viven los niños del estado y, en general, del país.

«El estudio del CER también destaca, sobre las actividades que hacen los niños en su entorno, que aquellos con mejores condiciones mencionan una diversidad de actividades recreativas como pasear, hacer gimnasia, patinaje o ir a la piscina; mientras que los de muy malas condiciones se quedan en casa para dibujar, ver la televisión, hacer tareas o leer», advirtió la universidad.

Se requiere apoyo

Entre los hallazgos más relevantes de la investigación cualitativa, está que los niños expresaron el deseo de ser escuchados con más frecuencia.

«En esta categoría, los niños de buenas condiciones en su mayoría no expresan sensación de ser escuchados y les gustaría expresar sus sentimientos más a menudo. Los de condiciones regulares indicaron que solo se sienten escuchados en momentos “especiales” o por actividades escolares. En cambio, los de muy malas condiciones expresaron el deseo de sentirse más escuchados en diversos contextos familiares», señala el estudio.

Además de ello, los investigadores mostraron preocupación por la brecha cognitiva que existe entre los niños de diferentes grupos socioeconómicos, que tiene que ver con el agravamiento del rezago escolar en Venezuela.

«Los niños de 8 años, del grupo socioeconómico más alto, mostraron una mayor capacidad analítica y de respuesta que los niños de 12 años del grupo socioeconómico más bajo. Este hallazgo también se correlaciona con el rendimiento académico observado en los datos de la comunidad»,

El CER-Ucab Guayana y los miembros del panel expertos que participaron en la presentación de los resultados aseguraron que se requieren políticas y programas que promuevan el bienestar infantil.

Dentro de sus propuesta mencionan la creación de alianzas con escuelas con el fin de expandir el estudio en Venezuela, el diseño de mecanismos para la visibilización y sensibilización en torno a la violencia, políticas públicas que permitan recuperar la infraestructura escolar y promover registros de casos particulares en los planteles.

Con información de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab)

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