Largas colas tempraneras, separadas por edades, con todos los protocolos de protección frente a la pandemia y en medio de una jornada laboral. Así transcurre el llamado a elecciones para la Asamblea de Madrid, la cual fija el rumbo hacia un nuevo gobierno regional que se extenderá hasta junio de 2023, cuando corresponden nuevos comicios.
Este martes, 4 de mayo, un total de 5.112.658 madrileños están convocados a votar en 1.084 colegios electorales repartidos por toda la capital. Y, desde la apertura de las mesas a las 9:00 de la mañana, los centros han estado concurridos con filas de hasta dos cuadras de longitud.
Una de las razones de ello, según explicó la Comunidad de Madrid, es que el protocolo de seguridad del COVID-19 retrasa el proceso. Cada centro está equipado con gel desinfectante y mascarillas que se deben suministrar a cada votante, además de franjas horarias por edad y permisos en los trabajos para los electores.
Hasta las 13 horas, la participación se situó en el 28,43% del padrón electoral, lo que implica 2,25 puntos porcentuales más que al mismo corte en los pasados comicios autonómicos de 2019, de acuerdo con un avance presentado por la Comunidad madrileña.
Todos los candidatos a la presidencia del Gobierno autonómico acudieron a votar antes del mediodía. Hicieron fila hasta llegar su turno, conversaron con los ciudadanos que allí se encontraban e invitaron a toda la población a participar en el proceso.
Isabel Díaz Ayuso, candidata del Partido Popular y presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid, ejerció su voto en el colegio La Inmaculada-Marillac, ubicado en el distrito de Chamberí. Allí la recibieron entre aplausos, saludos y cientos de fotos que los transeúntes le pedían.
“Cuenta con mi apoyo, Isabel. Tú eres mi candidata para arreglar Madrid”, dijo Carmen, de 78 años, a la presidenta de Madrid mientras la tomaba de las manos. Segundos después, la política le agradecía y acariciaba a los perros que acompañaban a la señora.
A pocos metros, una multitud se aglomeraba para saludar. Incluso los conductores que transitaban por las calles aledañas tocaban las bocinas de sus vehículos y saludaban. Ayuso también les respondía: “muchas gracias, de verdad”, decía mientras movía sus manos de un lado a otro en señal de aprecio.
“Mamá, ¿quieres ir a saludar a Ayuso?”, le preguntó Rosa a su madre. La candidata había entrado a un restaurante gallego, donde reposaba unos minutos y se tomaba un café junto a su equipo. Pero hasta allí ingresó la doña, que no dudó en fotografiarse.
Los seis principales partidos –Unidas Podemos, PSOE, PP, Más Madrid, Ciudadanos y Vox– llegan a las elecciones de Madrid con unas encuestas que pronostican el triunfo de Díaz Ayuso.
Fue Ayuso quien, el pasado mes de marzo, adelantó el proceso electoral para evitar una moción de censura que la sacara del Gobierno regional luego de que los acuerdos de gobernabilidad que mantenía con Ciudadanos se resquebrajaran.
Ahora, su lucha es por conseguir la mayoría absoluta de 69 diputados que le permita gobernar Madrid sin necesidad de establecer negociaciones con otras fracciones políticas. Sin embargo, las predicciones que auguran los sondeos obligarían a Ayuso, en casi todos los casos, a negociar con Vox para poder gobernar.
La duda, entonces, radica en qué tan amplia será la victoria del PP y su capacidad de negociación para que, en caso de no conseguir la mayoría, cuente con el respaldo de las demás fracciones de la derecha política que le permita alcanzar la cifra.
En caso contrario, el bloque de la izquierda política, conformado por los candidatos Ángel Gabilondo (PSOE), Mónica García (Más Madrid) y Pablo Iglesias (Unidas Podemos), se impondría en los comicios.
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Largas colas tempraneras, separadas por edades, con todos los protocolos de protección frente a la pandemia y en medio de una jornada laboral. Así transcurre el llamado a elecciones para la Asamblea de Madrid, la cual fija el rumbo hacia un nuevo gobierno regional que se extenderá hasta junio de 2023, cuando corresponden nuevos comicios.
Este martes, 4 de mayo, un total de 5.112.658 madrileños están convocados a votar en 1.084 colegios electorales repartidos por toda la capital. Y, desde la apertura de las mesas a las 9:00 de la mañana, los centros han estado concurridos con filas de hasta dos cuadras de longitud.
Una de las razones de ello, según explicó la Comunidad de Madrid, es que el protocolo de seguridad del COVID-19 retrasa el proceso. Cada centro está equipado con gel desinfectante y mascarillas que se deben suministrar a cada votante, además de franjas horarias por edad y permisos en los trabajos para los electores.
Hasta las 13 horas, la participación se situó en el 28,43% del padrón electoral, lo que implica 2,25 puntos porcentuales más que al mismo corte en los pasados comicios autonómicos de 2019, de acuerdo con un avance presentado por la Comunidad madrileña.
Todos los candidatos a la presidencia del Gobierno autonómico acudieron a votar antes del mediodía. Hicieron fila hasta llegar su turno, conversaron con los ciudadanos que allí se encontraban e invitaron a toda la población a participar en el proceso.
Isabel Díaz Ayuso, candidata del Partido Popular y presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid, ejerció su voto en el colegio La Inmaculada-Marillac, ubicado en el distrito de Chamberí. Allí la recibieron entre aplausos, saludos y cientos de fotos que los transeúntes le pedían.
“Cuenta con mi apoyo, Isabel. Tú eres mi candidata para arreglar Madrid”, dijo Carmen, de 78 años, a la presidenta de Madrid mientras la tomaba de las manos. Segundos después, la política le agradecía y acariciaba a los perros que acompañaban a la señora.
A pocos metros, una multitud se aglomeraba para saludar. Incluso los conductores que transitaban por las calles aledañas tocaban las bocinas de sus vehículos y saludaban. Ayuso también les respondía: “muchas gracias, de verdad”, decía mientras movía sus manos de un lado a otro en señal de aprecio.
“Mamá, ¿quieres ir a saludar a Ayuso?”, le preguntó Rosa a su madre. La candidata había entrado a un restaurante gallego, donde reposaba unos minutos y se tomaba un café junto a su equipo. Pero hasta allí ingresó la doña, que no dudó en fotografiarse.
Los seis principales partidos –Unidas Podemos, PSOE, PP, Más Madrid, Ciudadanos y Vox– llegan a las elecciones de Madrid con unas encuestas que pronostican el triunfo de Díaz Ayuso.
Fue Ayuso quien, el pasado mes de marzo, adelantó el proceso electoral para evitar una moción de censura que la sacara del Gobierno regional luego de que los acuerdos de gobernabilidad que mantenía con Ciudadanos se resquebrajaran.
Ahora, su lucha es por conseguir la mayoría absoluta de 69 diputados que le permita gobernar Madrid sin necesidad de establecer negociaciones con otras fracciones políticas. Sin embargo, las predicciones que auguran los sondeos obligarían a Ayuso, en casi todos los casos, a negociar con Vox para poder gobernar.
La duda, entonces, radica en qué tan amplia será la victoria del PP y su capacidad de negociación para que, en caso de no conseguir la mayoría, cuente con el respaldo de las demás fracciones de la derecha política que le permita alcanzar la cifra.
En caso contrario, el bloque de la izquierda política, conformado por los candidatos Ángel Gabilondo (PSOE), Mónica García (Más Madrid) y Pablo Iglesias (Unidas Podemos), se impondría en los comicios.