Este lunes aterrizó en el aeropuerto internacional de Maiquetía un avión N277EA, vuelo SWQ3960, procedente de Texas con escala en Miami, con 111 migrantes venezolanos que fueron deportados desde Estados Unidos.
Este es el segundo vuelo de «repatriación» realizado por el Gobierno de Nicolás Maduro, enmarcado dentro de un convenio con la administración Biden.
De acuerdo con Maduro, estos venezolanos fueron tratados como homicidas y terroristas. Inclusive, reveló, fueron sometidos a «torturas psicológicas y alimentados con comida podrida y congelada».
«Nuestros compatriotas han sido muy maltratados en Estados Unidos, tenemos un conjunto de evidencias del maltrato que les hacen en cárceles como si fueran delincuentes. Dice un muchacho que estuvo un año preso, ¿Qué delito cometió? Ningún delito, solo ser migrante y creer en el sueño americano que se transformó en tragedia», señaló.
El gobernante denunció una vez más una supuesta red de coyotes que promueve la migración de venezolanos a Estados Unidos, dirigida por los dirigentes opositores David Smolansky, Carlos Vecchio, Leopoldo López y Juan Guaidó.
Al respecto, reiteró su llamado a los connacionales que están en otros países para que retornen a su Patria: «No crean en cantos de sirena, en el falso cuento del sueño americano».
Por su parte, el ministro de Interior, Remigio Ceballos, informó que los connacionales fueron recibidos con «la mayor de las atenciones, para brindarles la garantía de sus derechos humanos y la reinserción a la sociedad venezolana, tras los difíciles momentos vividos en tierras extranjeras».
“En el primer grupo recibimos 127 personas, en esta oportunidad son 111, tendrán períodos de atención para luego darle la movilidad, cumpliendo así el texto constitucional, las garantías de sus derechos humanos”, informó a Venezolana de Televisión (VTV).