Familiares de pacientes del servicio de Hematología del principal hospital pediátrico de Venezuela, el J. M. de Los Ríos, denuncian que el centro no cuenta con inyectadoras ni con los equipos para realizar transfusiones de sangre, insumos necesarios para cumplir los tratamientos que requieren algunos niños, niñas y adolescentes.
«No hay ni una inyectadora. No hay macrogoteros, no hay equipos para transfusiones de sangre y no hay medicamentos como la hidrocortisona que es esencial», dijo a Efecto Cocuyo la madre de un paciente con talasemia.
La representante denunció que el hospital suma dos semanas consecutivas sin equipos para transfusiones de sangre, en un servicio donde a diario deben trasfundir a niños con sangre o plaquetas.
Los padres y las madres deben llevar comida, inyectadoras, agujas mariposa o scalp y todos los insumos necesarios para que los pacientes puedan transfundirse. Aseguró que cuando los equipos llegan, duran máximo dos días, por lo que muchas de las familias se ven obligadas a buscar recursos para salir a comprarlos.
«Venimos cada 21 días pero tomando todas las previsiones: trayendo el equipo de transfusión, la inyectadora y los yelcos», expresó. «Antes de prepararle la sangre a mi hijo, la enfermera constata que tengamos el equipo de transfusión, porque si no tenemos no puede hacerlo».
Su hijo sigue a la espera de un trasplante de médula y de la llegada del medicamento Exjade, un fármaco de alto costo necesario para su cuerpo pero que no llega desde 2018.
La madre de otro paciente con leucemia linfoblástica aguda (LLA) estuvo dos días en las afueras del triaje del J. M. de los Ríos por falta de camas para atender a su hijo. Este 8 de julio afirma que no hay inyectadoras adecuadas para su tratamiento y también carecen de los equipos para trasfundir sangre.
«Ya conseguimos una cama, pero no hay inyectadoras, no hay para ponerles vías. Mi hijo ahorita tiene que recibir antibióticos por una complicación y hay que ponerle cada dos horas un antibiótico y necesita inyectadoras», denunció.
Los niños, niñas y adolescentes del servicio de Hematología están amparados por medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) que exigen al Estado venezolano garantizar atención a todos los pacientes, sin embargo, organizaciones no gubernamentales y familiares de los pacientes aseguran que las autoridades no cumplen.
«Esperamos que sea el primero de muchos»: reanudan trasplantes renales de donante vivo en el J. M. de los Ríos
Fallece décimo niño del servicio de Nefrología del J. M. de los Ríos en 2022
Fallece paciente de 7 años del servicio de Nefrología del J. M. de los Ríos
Servicio de lactancia del J. M. de los Ríos aún espera ser reubicado
Instituto de Higiene emite alerta sanitaria por lotes falsificados de Herceptin en Venezuela
Hay minas antipersonal en rutas del Tapón del Darién, dice Procuraduría colombiana
Plataforma Unitaria: El pueblo mira indignado este nuevo saqueo madurista a la Nación
Quiénes son los “caídos” en la operación anticorrupción del chavismo
Familiares de pacientes del servicio de Hematología del principal hospital pediátrico de Venezuela, el J. M. de Los Ríos, denuncian que el centro no cuenta con inyectadoras ni con los equipos para realizar transfusiones de sangre, insumos necesarios para cumplir los tratamientos que requieren algunos niños, niñas y adolescentes.
«No hay ni una inyectadora. No hay macrogoteros, no hay equipos para transfusiones de sangre y no hay medicamentos como la hidrocortisona que es esencial», dijo a Efecto Cocuyo la madre de un paciente con talasemia.
La representante denunció que el hospital suma dos semanas consecutivas sin equipos para transfusiones de sangre, en un servicio donde a diario deben trasfundir a niños con sangre o plaquetas.
Los padres y las madres deben llevar comida, inyectadoras, agujas mariposa o scalp y todos los insumos necesarios para que los pacientes puedan transfundirse. Aseguró que cuando los equipos llegan, duran máximo dos días, por lo que muchas de las familias se ven obligadas a buscar recursos para salir a comprarlos.
«Venimos cada 21 días pero tomando todas las previsiones: trayendo el equipo de transfusión, la inyectadora y los yelcos», expresó. «Antes de prepararle la sangre a mi hijo, la enfermera constata que tengamos el equipo de transfusión, porque si no tenemos no puede hacerlo».
Su hijo sigue a la espera de un trasplante de médula y de la llegada del medicamento Exjade, un fármaco de alto costo necesario para su cuerpo pero que no llega desde 2018.
La madre de otro paciente con leucemia linfoblástica aguda (LLA) estuvo dos días en las afueras del triaje del J. M. de los Ríos por falta de camas para atender a su hijo. Este 8 de julio afirma que no hay inyectadoras adecuadas para su tratamiento y también carecen de los equipos para trasfundir sangre.
«Ya conseguimos una cama, pero no hay inyectadoras, no hay para ponerles vías. Mi hijo ahorita tiene que recibir antibióticos por una complicación y hay que ponerle cada dos horas un antibiótico y necesita inyectadoras», denunció.
Los niños, niñas y adolescentes del servicio de Hematología están amparados por medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) que exigen al Estado venezolano garantizar atención a todos los pacientes, sin embargo, organizaciones no gubernamentales y familiares de los pacientes aseguran que las autoridades no cumplen.