El opositor y exgobernador del estado Táchira, César Pérez Vivas, denunció que ha sido objeto de amenazas directas recibidas por parte de los «laboratorios del Estado-PSUV», en nombre de la conocida “furia bolivariana”.
“Quédate quiete señor Pérez Vivas, no busques problemas. Calladito te ves mejor, recuerda nuestra furia bolivariana y toda su familia corre el mismo peligro de morir al igual que tu, mejor renuncie a la oposición ridícula. Maduro si va”, se lee en el mensaje compartido por el político opositor en sus redes sociales.
En la red social X, Pérez Vivas envió este domingo, 24 de marzo, un mensaje al gobernante Nicolás Maduro donde lo hace responsable de lo que a él o a su familia le ocurra.
El exgobernador del Táchira instó a Maduro a detener las amenazas y el hostigamiento, y a llevar a cabo elecciones de manera justa y decente.
Qué es la furia bolivariana de la que habla Pérez Vivas
En medio de un clima tenso y en pleno inicio de un año electoral, el gobierno de Maduro ordenó a sus cuadros políticos, sociales y sindicales reaccionar ante un presunto plan golpista con la llamada “furia bolivariana”.
Este plan, asociado por expertos en derechos humanos con persecuciones, detenciones arbitrarias y control social, ha generado preocupación tanto dentro como fuera de Venezuela.
Días después de denunciar ante la Asamblea Nacional el desmantelamiento de hasta cuatro planes golpistas en su contra en 2023, Maduro llamó a la “máxima vigilancia” del alto mando militar para defender “la estabilidad” del país. Prometió que los presuntos golpistas se enfrentarían a lo que denominó como “la furia bolivariana de un pueblo que sabrá defender su democracia, su Constitución”.
El término “furia bolivariana” fue utilizado por primera vez por Maduro en 2020 para referirse a medidas “drásticas, audaces y valientes” durante el primer año de la pandemia de COVID-19, incluyendo el confinamiento forzado de pacientes positivos. Sin embargo, especialistas en derechos humanos lo han señalado como un intento de copiar el modelo autoritario chino para ejercer control social y político.
En esta ocasión, Maduro vuelve a invocar “la furia bolivariana” como estrategia para defender al chavismo de lo que ha calificado como “un plan conspirativo”.