Después de haber postergado en tres oportunidades su alocución en la Asamblea Nacional, el presidente Nicolás Maduro llegó a las 6:15pm (2 horas y 15 minutos después de lo previsto). Entró al hemiciclo de sesiones escoltado por Diosdado Cabello, presidente del Legislativo.
Afuera, las barras de personas que llevaron los diferentes organismos públicos se desinflaron temprano; primero por la lluvia que amenazaba constantemente con aguar la fiesta y luego por la larga espera.
Una vez en la tribuna de oradores, el Jefe de Estado dio un marco teórico sobre la situación con Guyana, para completar con una denuncia: “Hay una operación política, mediática, económica, contra Venezuela (…) una operación tenaza para implantar conflictos de alta intensidad”.
Señaló como principales responsables del conflicto al Pentágono de Estados Unido y la Exxon Mobil. Descalificó a David Granger, presidente de Guyana, por dar unas declaraciones, a su juicio, “vomitivas”.
Nicolás Maduro aseguró que el Esequibo debe ser recuperado por Venezuela e insistirá en ello. “Venezuela debe levantar la reclamación del Esequibo por las vías del derecho internacional. El Esequibo debe ser reconquistado en paz”, sentenció. Para ello pidió la anuencia de la oposición presente en el hemiciclo de sesiones.
Anunció tres medidas inmediatas: la primera es llamar a consulta a la embajadora de Venezuela en Georgetown, reducir el personal en la embajada y hacer una revisión exhaustiva de las relaciones con Guyana. Precisó que acudirá a organismos internacionales como Unasur, ONU y Celac para presentar pruebas de que la zona en reclamación le pertenece a Venezuela. Al secretario general de la ONU, Ban-Ki moon, le pedirá que active el mecanismo del Buen Oficiante y convoque a las dos partes a una reunión.
“El tratado de París es nulo, írrito para nosotros. Debe respetarse el reclamo histórico de nuestra tierra”, acotó el mandatario nacional, quien también consideró que la actitud de Guyana viola el acuerdo de Ginebra. Maduro señaló que el conflicto con Guyana es una herida de más de 200 años en el país, siete de ellos le correspondieron como Canciller de la República en la gestión del fallecido presidente Hugo Chávez.
Haciendo uso de los poderes habilitantes que le otorgara la AN el pasado marzo, Nicolás Maduro firmó un decreto con rango, valor y fuerza de Ley que crea la Comisión Presidencial para atender Asuntos Limítrofes. La Comisión la dirigirá el vicepresidente Jorge Arreaza, contará con una secretaria técnica y en ella también participarán el ministro de la Defensa, la Cancillería de la República, el Ministerio del Despacho de la Presidencia, el procurador General de la República, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, además de un representante que designe la Asamblea Nacional.