El decreto firmado en noviembre por Donald Trump es parte de sus planes contra el ingreso de cientos de miles de migrantes, en su mayoría centroamericanos, que recientemente intentaron entrar a Estados Unidos pidiendo en México el estatuto de refugiado.

El juez federal de Washington Randolph Moss dijo que esa medida es un “exceso de autoridad“, según la cadena ABC News. Según el magistrado la medida contradice las leyes de inmigración estadounidenses que permiten a los inmigrantes presentes físicamente en el país pedir asilo aunque no hayan entrado oficialmente, según el diario The Hill.

Un juez de California ya había bloqueado esa decisión de Trump cuyos abogados presentaron una apelación. El año pasado esa decisión generó vivas protestas, incluidas las de la  Agencia de la ONU para los refugiados (Acnur).

EEUU: guerra contra el derecho de asilo

La política migratoria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, es fuente de numerosas peripecias judiciales. La semana pasada un juez de California neutralizó una nueva regla del gobierno de Trump para impedir el asilo en la frontera sur de Estados Unidos.

Esa norma preveía rechazar todo pedido de asilo presentado por inmigrantes que no hubieses pedido estatuto de refugiado en México o en otros país en su camino hacia Estados Unidos.

En su mayoría oriundos de países pobres y violentos de América Central, esos migrantes presentan generalmente una solicitud de asilo que les permite permanecer en Estados Unidos mientras las autoridades tramitan la decisión de otorgarlo o no.

La semana pasada Trump anunció un acuerdo migratorio con Guatemala manteniendo la presión para que sus vecinos del sur controlen mejor a los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.

Lea también:

EEUU sale del tratado de desarme nuclear INF con Rusia

</div>