El triunfo de Donald Trump fue sorpresivo. Así parece indicarlo algunas reacciones de líderes de Europa, entre ellos François Hollande, quien indicó que se abre un camino de incertidumbre. Además, manifestaron su voluntad de mejorar las relaciones diplomáticas con Estados Unidos.
Barack Obama fue el primero en responder. Minutos después de conocerse los resultados, llamó a Trump y lo invitó a la Casa Blanca para discutir temas sobre la transición. “Asegurar una transición de poder tranquila es una de las principales prioridades que el presidente identificó a principios de este año”, publicaron mediante un comunicado.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, felicitó al magnate estadounidense y reiteró su disposición a trabajar para mejorar las relaciones entre ambos países. “México y EUA son amigos, socios y aliados que deben seguir colaborando por la competitividad y el desarrollo de América del Norte“, dijo a través de su cuenta en Twitter.
Confío que México y Estados Unidos seguirán estrechando sus lazos de cooperación y respeto mutuo.
— Enrique Peña Nieto (@EPN) 9 de noviembre de 2016
Líderes de Europa como Mariano Rajoy y Angela Merkel también expresaron su orientación a mantener una “estrecha cooperación”. Caso contrario fue el del Primer Ministro francés, François Hollande, quien aseveró que la victoria de Trump “abre un período de incertidumbre“.
Por su parte, Vladimir Putin expresó su esperanza de “trabajar en conjunto para sacar las relaciones ruso-estadounidenses del estado de crisis”. Además, instó a resolver los problemas actuales de la agenda internacional.
“Resultados en elecciones de Estados Unidos no tendrán efecto en las políticas de Irán”, dijo el jefe de Estado, Hasan Rohani.
Xi Jinping, presidente de China, exigió una ruta de “mutuo respeto” entre ambos países. “Espero trabajar con usted para expandir la cooperación China-EEUU en todos los terrenos”.