El presidente de Chile, Gabriel Boric, aseguró este martes que «no se puede gobernar con superficialidad» y subrayó que la remodelación del gabinete busca ser más efectivo a la hora de responder a las necesidades diarias de la población, asfixiada por la inflación y la crisis política.
En un breve discurso tras la presentación y firma del cargo de los nuevos ministros, el mandatario recordó a los nuevos secretarios de Estado «que el cambio no es protocolar ni para la foto», sino que debe responder de forma rápida a los desafíos que afrontan el país y la ciudadanía.
«Los cambios de gabinete siempre son dramáticos en Chile y a este no le ha faltado su dosis, tenía que doler. Pero creo que era necesario, y quizás, creo que no tengo por qué esconderlo, es uno de los momentos más difíciles políticamente que me ha tocado enfrentar», señaló el mandatario desde el palacio presidencial de La Moneda en Santiago.
Boric modificó el corazón de su equipo, sacando a la médica independiente Izkia Siches de la cartera de Interior, que se desempeñaba como jefa del comité político, y a Giorgio Jackson de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), su mano derecha y hasta hoy encargado de articular al Ejecutivo con el Congreso.
En su lugar ingresaron la militante del Partido por la Democracia (PPD), cientista política y reconocida figura de la exConcertación Carolina Tohá como ministra del Interior, en tanto la exasesora de Siches, la socialista y abogada Ana Lya Uriarte, llegó a dirigir la Segpres.
Además, realizó cambios sectoriales en Energía, Salud y Ciencias.
La nueva configuración del Gobierno chileno llega luego del aplastante triunfo de quienes rechazaron la propuesta constitucional con un 62 % de los votos en el plebiscito del domingo pasado, resultado que golpeó directamente a la administración de Boric.
«A quienes entran hoy, tienen varias grandes tareas. Necesitamos una nueva coordinación del Gobierno, que en conjunto fortalezcamos la coalición que nos respalda y por sobre todo enfrentar con quienes se quedan las urgencias ciudadanas», señaló el presidente.
«Aquí cambia también como es evidente el comité político, que es la conducción de nuestro Gobierno. También he decidido desde antes de estas últimas vertiginosas horas invitar a este comité a la ministra del Trabajo, Jeanette Jara, que ha demostrado tener la capacidad clara de lograr grandes acuerdos, a veces improbables, que es lo que más necesita nuestro país en este momento», agregó.
Con una crisis de seguridad que se gesta hace varios años en el país, reconocida en diversos sondeos como la mayor preocupación de la población chilena, Boric enfatizó en la necesidad de dar este tema el carácter de «tarea prioritaria».
«No me cabe duda de que vamos a enfrentar tareas difíciles, pero que con este gabinete vamos a estar a la altura. Tenemos que poner la acción donde ponemos nuestras palabras. Y quiero que sepan, compatriotas, que la seguridad de cada uno de ustedes una tarea prioritaria», enfatizó.
«No podemos como sociedad tolerar que compatriotas vean secuestrada su vida por la delincuencia, el narcotráfico o la violencia. Y por lo tanto, esos espacios públicos los vamos a recuperar. Este gabinete tiene especialmente encomendada esa tarea, pero no es lo único», apuntó.
Junto con recalcar las urgencias que identifica en el país, entre ellas el alza en el costo de la vida, las listas de espera en la salud pública y el déficit de vivienda que alcanza la falta de 600.000 hogares, Boric proyectó el cumplimiento de su programa de Gobierno.
«No dejaremos de lado las reformas estructurales con las cuales nos comprometidos ante el pueblo de Chile, porque este gabinete hace suyo el mandato del cambio de transformador por el cual llegamos a La Moneda, y en eso, ni un paso atrás», subrayó.
«Los procesos de transformación social son siempre de largo aliento. La misma historia de Chile nos ha enseñado que los grandes cambios, los que perduran, son aquellos que no se hacen de la noche a la mañana, y que para concretarse requieren ser abrazados por las grandes mayorías. No podemos olvidar esa lección», declaró en razón de los resultados del plebiscito constitucional.
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El presidente de Chile, Gabriel Boric, aseguró este martes que «no se puede gobernar con superficialidad» y subrayó que la remodelación del gabinete busca ser más efectivo a la hora de responder a las necesidades diarias de la población, asfixiada por la inflación y la crisis política.
En un breve discurso tras la presentación y firma del cargo de los nuevos ministros, el mandatario recordó a los nuevos secretarios de Estado «que el cambio no es protocolar ni para la foto», sino que debe responder de forma rápida a los desafíos que afrontan el país y la ciudadanía.
«Los cambios de gabinete siempre son dramáticos en Chile y a este no le ha faltado su dosis, tenía que doler. Pero creo que era necesario, y quizás, creo que no tengo por qué esconderlo, es uno de los momentos más difíciles políticamente que me ha tocado enfrentar», señaló el mandatario desde el palacio presidencial de La Moneda en Santiago.
Boric modificó el corazón de su equipo, sacando a la médica independiente Izkia Siches de la cartera de Interior, que se desempeñaba como jefa del comité político, y a Giorgio Jackson de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), su mano derecha y hasta hoy encargado de articular al Ejecutivo con el Congreso.
En su lugar ingresaron la militante del Partido por la Democracia (PPD), cientista política y reconocida figura de la exConcertación Carolina Tohá como ministra del Interior, en tanto la exasesora de Siches, la socialista y abogada Ana Lya Uriarte, llegó a dirigir la Segpres.
Además, realizó cambios sectoriales en Energía, Salud y Ciencias.
La nueva configuración del Gobierno chileno llega luego del aplastante triunfo de quienes rechazaron la propuesta constitucional con un 62 % de los votos en el plebiscito del domingo pasado, resultado que golpeó directamente a la administración de Boric.
«A quienes entran hoy, tienen varias grandes tareas. Necesitamos una nueva coordinación del Gobierno, que en conjunto fortalezcamos la coalición que nos respalda y por sobre todo enfrentar con quienes se quedan las urgencias ciudadanas», señaló el presidente.
«Aquí cambia también como es evidente el comité político, que es la conducción de nuestro Gobierno. También he decidido desde antes de estas últimas vertiginosas horas invitar a este comité a la ministra del Trabajo, Jeanette Jara, que ha demostrado tener la capacidad clara de lograr grandes acuerdos, a veces improbables, que es lo que más necesita nuestro país en este momento», agregó.
Con una crisis de seguridad que se gesta hace varios años en el país, reconocida en diversos sondeos como la mayor preocupación de la población chilena, Boric enfatizó en la necesidad de dar este tema el carácter de «tarea prioritaria».
«No me cabe duda de que vamos a enfrentar tareas difíciles, pero que con este gabinete vamos a estar a la altura. Tenemos que poner la acción donde ponemos nuestras palabras. Y quiero que sepan, compatriotas, que la seguridad de cada uno de ustedes una tarea prioritaria», enfatizó.
«No podemos como sociedad tolerar que compatriotas vean secuestrada su vida por la delincuencia, el narcotráfico o la violencia. Y por lo tanto, esos espacios públicos los vamos a recuperar. Este gabinete tiene especialmente encomendada esa tarea, pero no es lo único», apuntó.
Junto con recalcar las urgencias que identifica en el país, entre ellas el alza en el costo de la vida, las listas de espera en la salud pública y el déficit de vivienda que alcanza la falta de 600.000 hogares, Boric proyectó el cumplimiento de su programa de Gobierno.
«No dejaremos de lado las reformas estructurales con las cuales nos comprometidos ante el pueblo de Chile, porque este gabinete hace suyo el mandato del cambio de transformador por el cual llegamos a La Moneda, y en eso, ni un paso atrás», subrayó.
«Los procesos de transformación social son siempre de largo aliento. La misma historia de Chile nos ha enseñado que los grandes cambios, los que perduran, son aquellos que no se hacen de la noche a la mañana, y que para concretarse requieren ser abrazados por las grandes mayorías. No podemos olvidar esa lección», declaró en razón de los resultados del plebiscito constitucional.