El Banco Central de Venezuela emitió de forma sorpresiva el informe con las cifras macroeconómicas de todo 2015. Como cifra roja del documento el 180,9% que corresponde al Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) del año pasado, lo que ubica al país como uno de los más inflacionarios del mundo.
La máxima institución financiera no tuvo reparos en reconocer que durante el período pasado hubo una reducción significativa en la oferta de bienes y servicios de consumo final, a raíz de la baja en las importaciones en una economía de puertos.
Otra distorsión económica que el BCV admitió fue que el alza de los precios obedeció al persistente desabastecimiento que vivieron los venezolanos en 2015. En lo que va de año la situación no se ve más auspiciosa.
“El desabastecimiento de productos es percibido en la población como el problema más importante que aqueja al país”, menciona el documento.
La inflación de este año solo puede ser comparada con la de 1996, cuando la crisis hacía de las suyas en el gobierno del fallecido expresidente Rafael Caldera, la cual llegó a 103%. En 2012 la cifra anual llegó a 20,1%; en 2013 cerró en 56,2%; en 2014, 68,5%, lo que supone un ascenso de más del 100% en la inflación para el año pasado.
El alza de los precios no vino sola, pues el retroceso en el Producto Interno Bruto (PIB) fue otra de las cifras rojas que mostró el BCV con -5,7%, lo que acentúa la crisis económica respecto a 2014, cuando se ubicó en -3,9%.
Los más afectados en la caída del PIB fueron empresarios privados cuya actividad cayó 8,4%, en cifras oficiales. “Entre los factores que determinaron el mencionado comportamiento de la actividad económica en el año 2015 se encuentra la menor disponibilidad de divisas, producto del impacto adverso de la caída de los precios del petróleo, situación que afectó las importaciones requeridas por el aparato productivo nacional”, dice el informe institucional.
La comida se infló más que todo
El rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas sufrió un ascenso de precios de 315% anual y 34,6% durante el último trimestre del año pasado. Este número triplicó el dígito de 2014 en este rubro, el cual se ubicó en 102%.
Hoteles y restaurantes fueron los sectores inmediatamente más caros, su inflación anual se ubicó en 294,1%. Este dígito además de verse impactado por el alza de los alimentos y bebidas no alcohólicas, también varió por el subidón en las bebidas alcohólicas y el tabaco cuyo incremento de precios anual registró 273,3%.
Vestirse y calzarse también fue una proeza con una inflación de 146,5%.
Cuatro urbes bien caras
No por lo valiosas sino por lo caras. Barquisimeto, Guayana, Maturín y Puerto La Cruz fueron las ciudades que superaron una inflación de tres dígitos. Barquisimeto (224,0%), Ciudad Guayana (212,0%), Maturín (207,7%) y Barcelona-Puerto La Cruz (202,9%).
Mientras tanto, la ciudad capital y Maracaibo registraron 154,4% y 159,7%, respectivamente.
Con estas cifras, las primeras cuatro ciudades mencionadas superaron en inflación al INPC anual del país.
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