Distintos funcionarios del Estado, entre ellos policías, bomberos y hasta guardias nacionales, ejercieron su derecho al voto según revelan fotografías que circulan en las redes sociales.
En Los Teques también se notó esta ruptura pública de trabajadores públicos, que se sacudieron el temor a las represalias y salieron con sus uniformes a manifestarse contra la asamblea comunal que promueve el Gobierno de Nicolás Maduro.
La figura de Sara Ferreira, de 20 años, destacaba a leguas en la doble fila que hacían los electores alrededor de los cuatro costados de la Catedral San Felipe Neri, frente a la Plaza Bolívar, para ingresar al punto soberano de la Casa de la Cultura. A primera vista, muchos llegaron a pensar que se trataba de una provocadora al estilo de Zurda Conducta, pero un Sí pintado con marcador en sus cachetes y en la frente despejaba las dudas.
Camisa roja-rojita, bordada con la identificación del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (Inac), gorra similar y con su carnet en el pecho, Ferreira, residente en esta ciudad, dijo que había perdido el miedo y se disponía a votar a favor de la propuesta de la Unidad Democrática.
“La situación es insostenible para todos los venezolanos. Es nuestro deber oponernos a para evitar un mayor desastre que hundiría al país”.
Admitió que en su trabajo no conocen de su cambio. “Me estoy destapando ahorita”, y dijo estar consciente que su viraje significará que pierda su empleo “tal vez este mismo lunes”.
“Asumí el riesgo y echaré pa’lante. Le digo a todos los jóvenes que salgan a la calle, que no tengan miedo, que esto se acaba pronto”