Unos diputados fumaban, otros caminaban por los jardines del Palacio Legislativo, algunos decidieron sentarse en su curul a la espera de la buena nueva. Ya en el Consejo Nacional Electoral el subsecretario de la Asamblea Nacional y miembro de la Mesa de la Unidad Democrática, José Luis Cartaya, había ido a buscar la razón de la inquietud parlamentaria: la planilla que entregó este martes 26 de abril el Poder Electoral, para que así.

A las 2:45 pm, Henry Ramos Allup entró al hemiciclo de sesiones. Pidió al secretario que verificara si había quórum para iniciar la sesión. Estaba medio vacío el hemiciclo, por lo que decidió postergar por 20 minutos el comienzo. El diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela, Pedro Carreño, se molestó. Ramos Allup desde el estrado, con una gran sonrisa, le dijo: “Moringa, tomen bastante moringa”.

A las tres en punto, el presidente del Poder Legislativo pidió nuevamente la verificación de quórum. Para ese momento sí estaban todos. Del lado derecho del hemiciclo había sonrisas y camaradería, del lado izquierdo caras serias y de circunstancia.

El diputado Carreño, en nombre de su bancada, alabó la sentencia que emitió la semana pasada el Tribunal Supremo de Justicia, según la cual Ramos Allup no podrá controlar las intervenciones, ni negar el derecho de palabra. Con la Constitución en la mano, el presidente de la AN le respondió que la AN tiene plena autonomía. “Nuestro reglamento no puede ser modificado con caprichos y reglas que no están establecidas en la Carta Magna”.

La sesión fue interrumpida ante la llegada de la planilla por el revocatorio. “Revocatorio, revocatorio, revocatorio”, comenzaron a corear los diputados. Los primeros en firmar fueron Henry Ramos Allup y Enrique Márquez. Después, a lo largo de la sesión, la planilla fue el centro de atención. Los diputados se tomaban “selfies” después de firmar y, según la asistencia del día, más de 90 parlamentarios estamparon su rúbrica. Tampoco faltaron los momentos por Snapchat para transmitir el momento de la firma.

El primer punto del orden del día era la comparecencia del actual ministro de alimentación, Rodolfo Marco Torres, para que explicara las razones de la escasez de alimentos. No fue. No mandó explicación y, por tanto, la plenaria tomó la decisión de discutir el jueves 28 de abril aplicar un voto de censura contra el funcionario, por “contumacia”, según reveló Ramos Allup.

Acto seguido de la decisión de la mayoría de la MUD contra Marco Torres, la bancada del Psuv en pleno se paró y salió del hemiciclo. Entre dientes, el diputado Asdrúbal Chávez dijo a Efecto Cocuyo que se iban porque la sesión era “inconstitucional”. Eso no detuvo la sesión, pero sí hizo que fuese más rápida de lo normal.

Los cortes imprevistos de luz se han vuelto tan constantes que ya hay un Comité de afectados por los Apagones. Este grupo pidió a la AN que debatiera para lograr por parte del Estado una indemnización por todos los productos eléctricos que se han quemado.

Los números siempre son alarmantes, pero en su intervención por los apagones, el diputado Jony Rahal señaló que 48 horas antes de entrar en vigencia el racionamiento eléctrico hubo 8.900 apagones en el país. Enrique Márquez dijo que los cortes de luz se suman a las penurias que viven los venezolanos.

La mayoría opositora, o los que quedaban de ella en la sesión, aprobaron en primera discusión el proyecto de ley de protección e indemnización a los usuarios frente a la falla del sistema eléctrico.

José Guerra, el diputado y economista, tuvo la tarea de redactar, junto a otros siete diputados, las 10 propuestas de la AN para resolver la crisis económica. A mediados de febrero, la mayoría opositora rechazó el decreto de emergencia económica, pero ofrecieron esta alternativa.

Uno a uno, Guerra detalló todos los puntos: respeto a la propiedad privada y al estado de derecho, disminución de la inflación y mejoras en el ingreso de la población, apoyo a la producción nacional, incentivo para la diversificación de la economía, unificación gradual de los tipos de cambio, flexibilización en el control de precios, diseño de una nueva política petrolera, la aplicación de una política social eficiente para reducir la pobreza, refinanciamiento voluntario de la deuda externa y finalmente la ejecución de una política de transparencia de los fondos públicos. Nuevamente, la mayoría opositora que estaba sola en el hemiciclo aprobó el texto.

Ahora, con el decreto de que los organismos públicos no trabajarán ni miércoles, jueves y viernes por el ahorro energético, queda en entredicho que la AN sesiones este jueves 28 de abril y que pueda discutir ese día si aprueba el primer voto de censura de la legislatura 2016-2021.

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