A las 12:00 p.m. de este 16 de agosto, a pesar del calor y del bululú, los usuarios no se retiraban de los alrededores de la oficina del Servicio Administrativo de Identificación Migración y Extranjería, Saime, habilitada en la parroquia Coche. Todavía a esa hora, luego de esperar por más de seis horas, tenían la esperanza de la activación de la jornada de cedulación y de trámites de pasaportes, suspendida a primera hora de este lunes por la caída del sistema automatizado.
Más de 60 personas no paraban de moverse de un lado a otro, de preguntar y de agitar las carpetas para soplar el poco aire condensado en el pasillo que da entrada al edificio del Saime.
Los funcionarios que de vez en cuando cruzaban la reja solo les informaban que no había línea y que, por tanto, no podían iniciar los registros.
En la cola había personas de Los Teques, de La Vega, de Valles del Tuy e, incluso, una señora que llegó desde Cumaná para tramitar el documento que permite la movilización fuera de las fronteras venezolanas.
“Vine a Caracas porque mi hermana me dijo que por aquí asignaban las citas más rápido. Llegamos a las 6:00 a.m. y no han atendido a nadie. Muchas personas se fueron”, contó Irama Fernández.
Las dos salas de registros del Saime ubicadas en el piso 3 del único edificio que tiene el Centro Comercial de Coche estaban completamente vacías. Las cinco computadoras que se usan para las reseñas estaban apagadas y los trabajadores no estaban en sus lugares. Ni el vigilante, el primer filtro para entrar a las oficinas estaba en la puerta principal.
Solo pasaban quienes iban a retirar cédulas impresas, pues se las entregaban por taquilla.
“No me quiero mover para no perder la cita, pues tampoco nos informan sin van a ser reprogramadas”, dijo José Peláez.
Flexible sin línea
Del 16 al 20 de agosto el Saime hará la atención al público en general por terminal de número de cédula de identidad, correspondía este lunes a los terminales 0 y 1 y, como es semana flexible, le toca realizar los trámites relacionados con las citas asignadas para los pasaportes.
La información que daban en la puerta a los usuarios, de manera informal algunos trabajadores, era que hicieran de nuevo la solicitud a través de la página o que pidieran a la oficina que les reprogramara el evento.
Para quienes iban por cédula y, especialmente, los niños y niñas, ahora beben esperar el próximo lunes de la semana flexibles.
Muchas personas expresaron su malestar “porque no es solo madrugar para llegar aquí, es la gastadera de pasaje, el poco de copias que uno saca, el permiso en el trabajo y los funcionarios no dan una respuesta oportuna”, comentó Mary Fuentes, quien criticó que la entrega de pasaportes o prórrogas se haga únicamente a sus titulares y durante las semanas flexibles. “Entonces pasa algo como lo de este lunes y el que pierde el día es el usuario”.