A pocas semanas del inicio de la Feria de La Chinita en Maracaibo, líderes gremiales coincidieron en que el deterioro de los servicios públicos en el estado Zulia dificultará tránsito de los feligreses durante las fiestas.
El mes de noviembre está cargado de festividades para los marabinos, la mayoría devotos católicos de Nuestra Señora del Rosario de la Chiquinquirá. Este viernes, 2 de noviembre, se celebra el encendido de luces. Para el 10 de noviembre está pautada la bajada de la Virgen. Tres días después es la festividad de Santa Lucía.
«Lamentablemente, no podemos augurar que sea una buena feria o una buena navidad porque la gente choca con los problemas diarios, que es la escasez y la inflación«, dijo el representante de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), Franco Cafoncelli.
El líder gremial comentó que si bien el servicio eléctrico en la ciudad de Maracaibo ha mejorado desde el apagón del 24 de octubre, la distribución de agua «empeoró».
«No hay agua, no llega y la gente tiene que resolver de cualquier manera. Si viene, llega sucia», explicó Cafoncelli. Agregó que la situación complica los procesos diarios del comercio en la ciudad. A lo anterior se agregan las dificultades para encontrar gasolina, la inseguridad y la falta de transporte.
«Al sector productivo está afectando muchísimo porque tiene que pasar horas con los vehículos esperando la gasolina para ir a producir. Aquí es más fuerte porque hay contrabando», detalló el representante de Fedecámaras.
El presidente de la Cámara Hotelera del estado Zulia, José Elías Chamy Chakkal, aseguró que el sector tiene la capacidad para recibir a los feligreses, dado que a su juicio la afluencia no será tan alta, en parte por las pocas líneas aéreas que viajan a la ciudad.
30 hoteles pertenecen a la Cámara, de los cuáles sólo 10% cuenta con planta eléctrica. De este porcentaje, solo el 30% tiene la capacidad de autogenerar electricidad por varias horas. Es decir, sólo tres hospedajes tienen servicio continuo. Los demás trabajan por alrededor de cuatro horas.
Disponen de alrededor de 2.200 camas. No obstante, la capacidad ha disminuido por la falta de repuestos de diversos equipos y la escasez de personal.
Según Cafoncelli, el año pasado el hospedaje rondó casi 55 a 60% de la ocupación en los primeros 18 días. Se registró un pico de 75% el día del amanecer gaitero.
El presidente de la Central Sindical Noroeste de Transporte del estado Zulia, Rubén Esis, señaló que a pesar de las ayudas que ha recibido el sector, específicamente en el caso de los cauchos, la inflación y el costo de los repuestos dificultan el mantenimiento de las unidades.
Denunció «la corrupción» en las estaciones de servicio. «Entre los bomberos y las autoridades empiezan a vender los cupos», aseguró. Estimó que a la fecha hay 600 unidades de transporte activas.
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A pocas semanas del inicio de la Feria de La Chinita en Maracaibo, líderes gremiales coincidieron en que el deterioro de los servicios públicos en el estado Zulia dificultará tránsito de los feligreses durante las fiestas.
El mes de noviembre está cargado de festividades para los marabinos, la mayoría devotos católicos de Nuestra Señora del Rosario de la Chiquinquirá. Este viernes, 2 de noviembre, se celebra el encendido de luces. Para el 10 de noviembre está pautada la bajada de la Virgen. Tres días después es la festividad de Santa Lucía.
«Lamentablemente, no podemos augurar que sea una buena feria o una buena navidad porque la gente choca con los problemas diarios, que es la escasez y la inflación«, dijo el representante de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), Franco Cafoncelli.
El líder gremial comentó que si bien el servicio eléctrico en la ciudad de Maracaibo ha mejorado desde el apagón del 24 de octubre, la distribución de agua «empeoró».
«No hay agua, no llega y la gente tiene que resolver de cualquier manera. Si viene, llega sucia», explicó Cafoncelli. Agregó que la situación complica los procesos diarios del comercio en la ciudad. A lo anterior se agregan las dificultades para encontrar gasolina, la inseguridad y la falta de transporte.
«Al sector productivo está afectando muchísimo porque tiene que pasar horas con los vehículos esperando la gasolina para ir a producir. Aquí es más fuerte porque hay contrabando», detalló el representante de Fedecámaras.
El presidente de la Cámara Hotelera del estado Zulia, José Elías Chamy Chakkal, aseguró que el sector tiene la capacidad para recibir a los feligreses, dado que a su juicio la afluencia no será tan alta, en parte por las pocas líneas aéreas que viajan a la ciudad.
30 hoteles pertenecen a la Cámara, de los cuáles sólo 10% cuenta con planta eléctrica. De este porcentaje, solo el 30% tiene la capacidad de autogenerar electricidad por varias horas. Es decir, sólo tres hospedajes tienen servicio continuo. Los demás trabajan por alrededor de cuatro horas.
Disponen de alrededor de 2.200 camas. No obstante, la capacidad ha disminuido por la falta de repuestos de diversos equipos y la escasez de personal.
Según Cafoncelli, el año pasado el hospedaje rondó casi 55 a 60% de la ocupación en los primeros 18 días. Se registró un pico de 75% el día del amanecer gaitero.
El presidente de la Central Sindical Noroeste de Transporte del estado Zulia, Rubén Esis, señaló que a pesar de las ayudas que ha recibido el sector, específicamente en el caso de los cauchos, la inflación y el costo de los repuestos dificultan el mantenimiento de las unidades.
Denunció «la corrupción» en las estaciones de servicio. «Entre los bomberos y las autoridades empiezan a vender los cupos», aseguró. Estimó que a la fecha hay 600 unidades de transporte activas.