La Cruz Roja llamó este viernes, 24 de abril, a crear algún tipo de mecanismo que facilite el apoyo internacional a las comunidades más vulnerables en Venezuela y aseguró que las sanciones complican la entrega de ayuda para combatir al COVID-19 en el país.
En una conferencia de prensa remota, el presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Ficr), Francesco Rocca, aseguró que la Cruz Roja «no quiere meterse en política» porque no es su trabajo, pero dijo que los distintos actores deberían crear algún tipo de «comité conjunto» para facilitar la entrada de ayuda en estos momentos de crisis.
Según el italiano, la entrada de ayuda en Venezuela es «muy lenta» y «en algunos casos» las sanciones están afectando la capacidad de la organización para suministrar materiales.
La Ficr entregó recientemente más de 40 toneladas de asistencia, principalmente equipos de protección para sanitarios y kits de higiene, pero Rocca subrayó que eso es solo «una gota en el océano» de las necesidades que tiene Venezuela ante la pandemia.
Preguntado por la posibilidad de impulsar un diálogo entre Washington y Caracas sobre las sanciones, Rocca subrayó que se trata de algo difícil, pero que sería importante para asegurar que la Cruz Roja y el resto de organizaciones humanitarias puedan llevar al país tanta ayuda como sea posible.
Según aseguró, toda la comunidad humanitaria está buscando aumentar el apoyo para Venezuela, que ya vivía una grave crisis que ahora puede verse exacerbada por la pandemia.
Los recursos, sin embargo, son ahora mismo más escasos, dado el peligro que el coronavirus plantea también para muchos otros países, tanto en Latinoamérica como en otros continentes.
Preguntado por la situación en Brasil, Rocca aseguró que el país sufre un «alto riesgo» por la «división de opiniones a nivel político» sobre el virus, una crisis que requiere que los líderes «hablen con una sola voz». El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ha minimizado repetidamente el peligro de la enfermedad, que hasta este jueves se había cobrado 3.313 vidas en el país.
Con información de EFE.
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La Cruz Roja llamó este viernes, 24 de abril, a crear algún tipo de mecanismo que facilite el apoyo internacional a las comunidades más vulnerables en Venezuela y aseguró que las sanciones complican la entrega de ayuda para combatir al COVID-19 en el país.
En una conferencia de prensa remota, el presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Ficr), Francesco Rocca, aseguró que la Cruz Roja «no quiere meterse en política» porque no es su trabajo, pero dijo que los distintos actores deberían crear algún tipo de «comité conjunto» para facilitar la entrada de ayuda en estos momentos de crisis.
Según el italiano, la entrada de ayuda en Venezuela es «muy lenta» y «en algunos casos» las sanciones están afectando la capacidad de la organización para suministrar materiales.
La Ficr entregó recientemente más de 40 toneladas de asistencia, principalmente equipos de protección para sanitarios y kits de higiene, pero Rocca subrayó que eso es solo «una gota en el océano» de las necesidades que tiene Venezuela ante la pandemia.
Preguntado por la posibilidad de impulsar un diálogo entre Washington y Caracas sobre las sanciones, Rocca subrayó que se trata de algo difícil, pero que sería importante para asegurar que la Cruz Roja y el resto de organizaciones humanitarias puedan llevar al país tanta ayuda como sea posible.
Según aseguró, toda la comunidad humanitaria está buscando aumentar el apoyo para Venezuela, que ya vivía una grave crisis que ahora puede verse exacerbada por la pandemia.
Los recursos, sin embargo, son ahora mismo más escasos, dado el peligro que el coronavirus plantea también para muchos otros países, tanto en Latinoamérica como en otros continentes.
Preguntado por la situación en Brasil, Rocca aseguró que el país sufre un «alto riesgo» por la «división de opiniones a nivel político» sobre el virus, una crisis que requiere que los líderes «hablen con una sola voz». El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ha minimizado repetidamente el peligro de la enfermedad, que hasta este jueves se había cobrado 3.313 vidas en el país.
Con información de EFE.