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Cuatro escritores venezolanos: Mónica Montañés, José Pulido, Eloi Yagüe Jarque y Blanca Elena Pantin comparten la lista de los libros que más les gustaron o impactaron en 2020. Una selección para ser tomada en cuenta.

Mónica Montañés
Muchos de los libros que me leí este año, pero decidí hablar de estos. Uno es “Como polvo en el viento” de Leonardo Padura, el escritor cubano que me encanta. Este libro no es de Mario Conde, su famoso detective. Es una novela sobre la emigración cubana, sobre los que se han ido y los que se han quedado, y sus por qué. Lo narra a través de un grupo de amigos que se conoce desde la juventud y cómo sus vidas se ven afectadas por el devastador deterioro de la isla y de sus vidas durante el llamado período especial. Me encantó en principio por lo bien escrito que está, pero me impactó muchísimo sentirme tan reflejada. Sentí que, de alguna manera, hablaba de mí, de nosotros los venezolanos. Es un libro extraordinario sobre la emigración y la nostalgia, la de los que se quedan y la de los que se van

Otro es “pequeñas mujeres rojas” (escrito así, en minúsculas), de Marta Sanz, una escritora española que me fascina. A ella, al igual que a Padura, también la conocí por sus novelas negras, por un detective singular que creó, Arturo Zarco. Esta novela no lo tiene como protagonista, aunque sí aparecen tanto él como varios de los personajes que habitan sus historias. De hecho, la protagonista es Paula Quiñones, su ex mujer. Pero lo puedes disfrutar igual los conozcas o no. Es un libro extraordinario sobre la guerra civil española y la postguerra, lo que se vivió y lo que se sigue viviendo hoy en día porque esa herida sigue abierta y generando nuevas historias, nuevos dolores y horrores. El libro trata de que Quiñones va a un pueblo para investigar “un entierro”, porque han aparecido unos cadáveres de vecinos que fueron asesinados en aquella época… y lo que desentierran y sus consecuencias es espeluznante. Está escrito magistralmente y con una libertad que hace que sea una delicia leerlo a pesar del horror que narra.

José Pulido
He leído y releído tantos libros este año que ya ni los recuerdo, pero los que más me interesaron fueron los de Mircea Cărtărescu, en especial “Nostalgia” y su testimonio de vida como escritor rumano que tituló “Las bellas extranjeras”. Mircea tiene mucha claridad respecto al existir del poeta, del narrador.

Leí varias obras de Iris Murdoch, pero me gustó mucho “Henry y Cato”. Ella es una escritora de un talento narrativo que recuerda el oficio de Henry James pero con la pasión creadora de Herta Müller.

Por cierto, de Herta Müller fue uno de los mejores libros que he leído: “El hombre es un gran faisán en el mundo”. Es una obra que recomiendo todo el tiempo. A cada rato. Así como recomiendo todos los días la poesía de Anna Ajmátova.

Leí todos los libros de Fred Vargas, la señora que domina la novela negra en estos tiempos. Fue un buen entretenimiento. Ella es una especie de magnífica continuadora de la calidad narrativa que desarrolló con sus personajes el inolvidable Simenon.

Los libros que más me impresionaron fueron los poemarios “Paisaje con grano de arena”, de Wislawa Szymborska, porque conseguí una magnífica traducción y “Un país mundano”, de John Ashbery. Este Ashbery es el poeta más elevado que se ha registrado en este nuevo siglo y en el que se fue.

Me empeciné en coleccionar los libros que llaman de culto y leí otra vez, en mejor traducción: “La montaña mágica”, de Thomas Mann y “Jakob von Gunten”, la tercera novela de Robert Walser. También “Niétochka Nezvánova” de Fedor Dostoyevski publicada en 1849.

Leí todos los libros del mexicano Jorge Ibargüengoitia y recomiendo cada uno de sus relatos. El humor adquiere con él una categoría diamantina. Jorge fue uno de los escritores fallecidos en aquel vuelo, donde también murieron Ángel Rama, Manuel Scorza y Marta Traba.

La poesía venezolana llenó mis horas y la admiré completamente. La narrativa venezolana me siguió dando esperanzas. Con el austríaco Peter Handke me sentí sorprendido. Leí varios de sus libros y su poesía me fascinó, es como un juego de inteligencia y de ironía. Autor extraordinario y concreto. Sigo pegado con los textos del filósofo Peter Sloterdijk, difíciles pero buenos para iluminar zonas oscuras.

Ahora leo más ya saben por qué. Y he llenado de libros la computadora.

Eloi Yagüe Jarque

CURSO (RÁPIDO Y SENTIMENTAL) DE ITALIANO / Slavko Zupzic / Fundación para la Cultura Urbana / Caracas, 2019

Youseff Benalfi es un filólogo de origen marroquí que vive en Barcelona. La muerte de su querido hermano Ahmed le produce una herida que no cesa ni cicatriza. Convertido en un hombre que huye de esa muerte, “que huía incluso de su sombra”, llega a Salerno. La intención es olvidar el dolor sumergiéndose en un trabajo que ama: Entrevistar a su admirado poeta bosnio Izet Sarajlić, que vive en la ciudad mediterránea. Pero cuando llega están empapelando las paredes con la noticia de su muerte, así que solo le queda conversar con quienes lo conocieron, o sea con nadie.

Tal vez la vida es solo eso: correr tras una esquina humeante. En la posada de la Nonna Rosa conoce a Gemma, que es como decir el amor que reluce y le devuelve al personaje el cuerpo al alma, o el alma al cuerpo, como se prefiera.

Si usted quiere disfrutar un libro en forma de novela que le deje un buen sabor de boca, lea este. Yo lo leí en dos tandas y su único defecto es que me pareció muy corto.

El destacado escritor venezolano Slavko Zupzic (Valencia, estado Carabobo, 1970) tiene la rara virtud de tratar los temas profundos con liviandad. Aquí está todo lo que nos concierne en este momento tan extraño caracterizado por el desarraigo: la memoria y el olvido, el extrañamiento, la soledad, la celebración de los placeres de la vida (la comida y el vino mediterráneos, por ejemplo) y, en contraste, la xenofobia de algunos europeos. Pero a la vez está presente el humor venezolano y esas pequeñas joyas que son las “paradojas del amor binacional”. Un libro inclasificable pero ¿a quién le importan las etiquetas cuando se disfruta de una prosa entrañable como la de Zupzic? Esta novela ganó el premio de la Fundación para la cultura urbana en 2019.

LA CLARIDAD / Marcelo Luján / Editorial Páginas de Espuma / ganador del Premio Ribera del Duero 2020

Marcelo Luján (Buenos Aires, 1973) es un escritor argentino afincado en España desde hace muchos años. Narrador muy bien dotado ha desarrollado una impecable trayectoria literaria más que nada como cuentista, que ya es decir mucho pues en España es muy difícil publicar cuentos. Este premio que acaba de obtener es prácticamente el más importante de España en este género literario. En Venezuela se dio a conocer en 2016 con su novela breve Moravia, que fue publicada por la editorial Ígneo. Con ese motivo tuve la oportunidad de entrevistarlo para Efecto Cocuyo https://efectococuyo.com/opinion/entrevista-al-autor-de-moravia-marcelo-lujan/

En aquella oportunidad me confesó que le interesaba el tema del mal y la crueldad. En efecto en estos seis cuentos, alguno de ellos casi novela breve, Luján explora zonas oscuras del ser humano. (montechamber.com) En particular hay mujeres en peligro (y algunas peligrosas), hombres inquietantes situaciones limítrofes en las que se juega la vida y la muerte.

Es difícil hablar de estos relatos impecables, que recrean atmósferas propias de la  novela negra, sin revelar detalles de la trama que es preferible dejar que el lector descubra por sí mismo, Baste decir que se trata de narraciones de gran tensión dramática, construidas a pulso por un narrador que domina su oficio y es capaz de mantener en vilo al lector, lo cual no es otra cosa que una manifestación de maestría narrativa.

Blanca Elena Pantin

Viaje al poscomunismo, de Ana Teresa Torres y Yolanda Pantin, Editorial Eclepsidra, Caracas 2020

Viaje al poscomunismo es un libro de lectura en espejo de los seis viajes que las autoras hicieron a Rusia y a países satélites de la Unión Soviética y de Europa del Este y con esos recorridos, Venezuela. El relato de Ana Teresa Torres es quirúrgico y reconstruye páginas del comunismo y nazismo por el que fueron arropados muchos de los países visitados con la observación de primera mano de lo que esas experiencias totalitarias dejaron. Junto al relato de AT, las fotografías de Yolanda Pantin que exponen la crudeza y el paisaje que recorren.

Los espacios del adiós y otros poemas, antología, de José Pulido. Editorial Ítaca, Venezuela, 2020

Para quienes han leído y conocen la poesía de José Pulido y siguen los poemas que publica en su perfil de Facebook y los siempre nuevos lectores, celebrarán esta antología que reúne una selección de sus bellos poemas de amor. El amor enamorado, al terruño, a la infancia, a la amistad, de inmenso amor a la vida. El libro es uno de los primeros cuatro de Editorial Ítaca, sello dirigido por Milagros Mata-Gil y Eziongeber Álvarez que apuesta a las plataformas virtuales desde Venezuela.

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