Justiniano Mata tenía 80 años y era el mayor de los pacientes que atendía el Centro de Nefrología Barcelona, en el estado Anzoátegui. En sus últimos días de vida presentó edemas en sus extremidades, hinchazón causada por la acumulación de líquido, por su condición de insuficiencia renal. La hinchazón era tal que el octogenario requería dializarse todos los días, pero la escasez de insumos para las máquinas de diálisis convirtieron el tratamiento vital en un imposible. Justiniano falleció el pasado viernes, 9 de febrero, por la crisis que azota a las unidades de diálisis del país.
Los pacientes renales necesitan dializarse tres días por semana durante cuatro horas para limpiar su sangre, función que cumplirían sus riñones si estuvieran en buen estado. Estos son “conectados” a las máquinas de diálisis, que eliminan las toxinas de la sangre y el exceso de líquido en el organismo.
Para realizar este procedimiento médico es necesario que las máquinas tengan un filtro dializador, que es el dispositivo que depura a la sangre de las toxinas. Sin embargo, este insumo escasea actualmente no solo en el Centro de Nefrología Barcelona, sino en todas las unidades de diálisis del país.
“Hay pacientes que ya no estaban recibiendo las tres diálisis por semana por la falta de material. Mi papá sí se estaba dializando, pero no había suficientes insumos como para dializarlo todos los días, como él lo necesitaba”, explicó a Efecto Cocuyo José Mata, hijo de Justiniano Mata.
En el centro, ubicado en la capital de Anzoátegui, los pacientes deben buscar los filtros para poder recibir la atención médica. José Mata debió conseguir el material necesario para el tratamiento de su padre en otros centros de salud.
Los pacientes del lugar incluso han optado por no beber líquido para evitar acumularlo y que se formen edemas.
El caso de Justiniano Mata es el primero que se conoce en el estado Anzoátegui, pero no en el país. Entre el 1 y el 11 de febrero medios de comunicación han registrado la muerte de otros 11 pacientes renales por la falta de diálisis.
El 1 de febrero falleció Susana García (66) de Barquisimeto, Lara, quien tenía cinco días sin dializarse. El día siguiente murió Marlon González (22) en el estado Hospital Adolfo Pons, en Marcaibo, Zulia.
El sábado 3 de febrero se registraron las muertes de cinco pacientes: Aura Fernández (74), en Maracaibo; Reina García (59), en Barquisimeto; Arlenis Chaurán, en Guarenas, Miranda; Efra Márquez (53), en Maracaibo; y Gregoria Linares, en Acarigua, Portuguesa.
El domingo 4 falleció el párroco Nermis Bolaños (53) en Barquisimeto, Lara. El seis de febrero siguieron las muertes de una paciente larense llamada Lidia (42) y de Lenin Rangel (30) en la ciudad de Mérida, del estado que lleva el mismo nombre.
#Venezuela – Murió paciente renal por asfixia debido a la gran cantidad de líquido que tenía en su cuerpo #Lara #TVVNoticias pic.twitter.com/k5x1uPlB6k
— TVV Noticias (@TVVnoticias) February 6, 2018
La última muerte registrada por los medios de comunicación fue la de Pedro Iriarte, de 66 años. Murió en el Hospital Militar de Caracas y su condición de salud se complicó porque también era paciente diabético.
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