El mandatario Nicolás Maduro calificó como una «gran victoria» el operativo de seguridad desplegado desde el pasado miércoles 7 de julio para desarticular las megabandas instaladas en la Cota 905 y sus alrededores.
Insistió en que en ese sector al suroreste de Caracas, también estaban desplegadas «mafias y paramilitarismo colombiano» y que estos grupos son dirigidos por integrantes de la oposición venezolana como Leopoldo López.
Este sábado 10 de julio, Maduro confirmó que hay tres paramilitares detenidos en la operación, pero que los testimonios arrojaron que había al menos 20 de ellos en ese territorio desde hacía meses.
«De los delincuentes terroristas caídos en la refriega me informan a esta hora que hay 10 que no tienen huella dactilar venezolana, identificable en Venezuela, presumiblemente 10 abatidos paramilitares terroristas que vinieron de Colombia», expresó durante el acto de transmisión de Mando del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional, el Ejército, la Armada, la Guardia Nacional y la Milicia Bolivariana.
Agregó que aún siguen tras los cabecillas de las bandas y del grupo de paramilitares colombianos involucrados que huyeron. «Las fuerzas policiales y militares de Venezuela los encontrarán. Más temprano que tarde los encontrarán para consolidar la victoria de la paz», dijo.
Asesinato del presidente Jovenel Moïse
En su alocución de este sábado, Maduro volvió a referirse al asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, y reiteró que el Gobierno de Colombia estaría involucrado en el magnicidio.
Refirió que, hasta los momentos, se identificó a 28 asesinos, de los cuales 26 eran mercenarios colombianos.
«El Gobierno de Colombia tiene que haber sabido de la preparación de ese grupo de mercenarios para comerte ese crimen en Haití… y tiene que reconocerlo», expresó.
También se dirigió a su homólogo estadounidense, Joe Biden, y aseguró: «las agencias de inteligencia de los Estados Unidos, la CIA, la NSA, el FBI, tiene que haber conocido de estos movimientos de mercenarios, porque se vieron en sus narices, fue en La Florida».
Maduro también afirmó que el responsable de contratar y enviar a esos mercenarios a Haití sería un venezolano de apellido Itriago que dirige una empresa llamada CUT. Lo describió como «un militante de la derecha venezolana extremista, amigo personal de Leopoldo López y de Juan Guaidó«.
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