En primera fila estaba el nuncio apostólico Aldo Giordano, con su representativo traje negro y su crucifijo; también estaba el personal de las embajadas y los diputados que, para esta sesión, cambiaron sus curules por sillas oscuras en el hemiciclo protocolar.
Todos aguardaban expectantes a que comenzara la sesión especial de la Asamblea Nacional dedicada al 23 de enero de 1958 y a la gesta que ese día protagonizaron los venezolanos para salir del dictador Marcos Pérez Jiménez.
El orador de orden, el historiador Tomás Straka, subió a la tribuna y destacó una contundente frase: “Nunca como ahora la búsqueda de consensos ha sido tan necesaria”.
“El 23 de enero fue un triunfo colectivo. Esa es la lección fundamental ante este desafío que hoy nos concierne. Cuando la sociedad en su conjunto se rebeló contra la dictadura y en un clima de unión, se encaminó hacia la democracia, marcó una pauta que aún resuena entre nosotros. Y cuando hablamos de conjunto, de eso que entonces se llamó “el espíritu del 23”, lo hacemos en el sentido más amplio de la palabra. Ahí estaban casi todos. Los comunistas, que tanta sangre derramaron en la Resistencia, junto a los adecos, compañeros fundamentales en la lucha; la Iglesia y los sindicatos; los empresarios y los intelectuales; los socialcristianos y los militares. El espíritu del 23 de enero fue la cuna del espíritu de ‘Puntofijo’ y de un sistema definido por los consensos”, continuó.
El profesor señaló que los venezolanos deben “retomar la democracia y el régimen de libertades como camino para sacar al país de la crisis” y recordó que “cuando la libertad lucha contra el despotismo, se generan las condiciones indispensables para vivir mejor”.
Los balcones del hemiciclo estaban llenos de estudiantes de las principales universidades: UCV, USB, Ucab, entre otras, quienes también fueron invitados especiales a conmemorar la lucha que dio la generación universitaria del 28 para retomar la democracia en el país.
El presidente del Parlamento, Julio Borges, celebró el discurso del historiador y expresó que “a casi 60 años del 23 de enero, la lucha sigue siendo por el voto”.
Antes de que culminara la breve sesión, Borges pidió a los parlamentarios viajar a Guárico, a la cárcel 26 de Julio, en respaldo al diputado Gilber Caro quien está detenido en ese lugar.
“A Caro no sólo se le está violando la inmunidad, sino que se está intentando juzgar a un civil en tribunales militares”, reiteró.
Fotos: Asamblea Nacional