En menos de una cuadra chavismo se mantiene «leales siempre, traidores nunca» este #30Abr

POLÍTICA · 30 ABRIL, 2019 20:12

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Shari Avendaño | @shariavendano


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Decenas de personas se acercaron al Palacio de Miraflores para manifestar que se mantienen «leales siempre, traidores nunca» al chavismo, quien este martes 30 abril se enfrenta a la ejecución del inicio del  «cese de la usurpación«, anunciada por el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, líder de la oposición venezolana.

La mañana de este martes, Guaidó difundió un mensaje en sus redes sociales, en el que dice que el «cese de la usurpación empezó hoy». La transmisión fue grabada en los alrededores de la base aérea La Carlota y en compañía del preso político, Leopoldo López.

Minutos después del anuncio, el «número dos» del chavismo y presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello, llamó a la ciudadanía a concentrarse en los alrededores del Palacio de Miraflores a «defender a la revolución».

Efecto Cocuyo estuvo en la concentración desde la 1 de la tarde y conversó con algunos militantes. Según testimonios de comerciantes en el lugar, los adeptos empezaron a llegar a partir de las 7 de la mañana, «pero ya a esta hora (2 de la tarde) muchos se han ido».

Los manifestantes estaban concentrados desde la esquina Carmelitas hasta la esquina Bolero, donde estaba ubicada la tarima desde la que se escuchaban las alocuciones de los diputados de la Asamblea Nacional Constituyentes.

De Carmelitas a Puente Llaguno, el chavismo buscaba protegerse del sol en la poca sombra que daban los edificios de los ministerios de Finanzas y Relaciones Exteriores, por lo que no había gran cantidad de personas en la vía. La mayor cantidad de militantes se observó a partir de Puente Llaguno, sin embargo no había dificultades para caminar de un extremo a otro de la manifestación.

«Sólo el pueblo salva al pueblo»

«¡Pueblo a la calle!», dice una señora a su acompañante mientras se ríe y baila. Ambas portan una bandana tricolor en el brazo, símbolo de la lealtad al fallecido expresidente Hugo Chávez desde el año 2013. Ambas se reguardan del sol a unos metros de la tarima y escuchan con atención las palabras de un constituyente.

«¡Hoy más que nunca unión cívico-militar! Estamos en combate como dijo nuestro comandante supremo (Hugo Chávez). ¡Vigilia, preparados para la acción!», indicó un militante del chavismo desde la tarima.

Más temprano, alrededor de las 11:00 de la mañana, antes de que se instalara la tarima en la esquina Bolero, Cabello había hablado a la militancia desde un camión. Desde entonces, ningún otro dirigente de relevancia del chavismo habló desde el escenario.

En puente Llaguno estaban estacionadas dos filas de motos. Cerca de ellas, un camión decorado con banderas de Venezuela transmitía en vivo la señal del canal estatal, Venezolana de Televisión (VTV), que repetía las declaraciones del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.

«Estos chamos no se dan cuenta y eso da arrechera (molestia)», dijo un hombre al grupo que lo acompañó a la concentración sobre la oposición venezolana. A juicio de voceros chavistas, como el Canciller Jorge Arreaza, la acción a los alrededores de la base aérea La Carlota cuenta con el apoyo de los Gobiernos de Estados Unidos y Colombia.

«Estaba escuchando Radio Rumbo y el locutor dijo que no había internet desde hace varias horas y yo dije «¿será que es un golpe de Estado?»», comentó una señora que se identificó como «colectiva«.

En vigilia

«Tengo un anuncio importante que hacerles: ¡se les espichó (acabó) lo de Altamira!», dijo desde la tarima un constituyente a la militancia sobre la protesta de la oposición en la zona, en la que se registraron heridos. Pocas personas reaccionaron a lo dicho por el líder chavista. Las personas estaban concentradas en sus conversaciones y buscaban la forma de protegerse del sol.

Varios hombres con chalecos antibalas y armas largas, algunos vestidos de civil y otros con uniforme militar, caminaban de un lado a otro bajo la tranquila mirada del chavismo; conforme a la «unión cívico-militar» que promueve la gestión de Nicolás Maduro.

La calle se fue quedando sin chavismo a partir de las 2:34 de la tarde. Los espacios vacíos se volvían a llenar con grupos de empleados públicos que al rato también se retiraban. A las 3:28 de la tarde llegó un grupo de motorizados. Tres de ellos resaltaban: tenían el rostro cubierto con una tela que apenas dejaba ver sus ojos. A esa hora, el chavismo se concentraba entre el extremo más próximo a la esquina Bolero y la tarima.

Minutos después, un grupo más nutrido de colectivos llegó. Esta vez, 13 personas tenían la cara tapada.

«Esa es una fuga por donde lo veas. Lo mejor que puede hacer es irse del país y quedar en el olvido. Cuando (Juan) Guaidó se fue a Colombia dije que se acabó el problema. No entiendo cómo le quitaron la inmunidad y no pasa nada«, comentó uno de los participantes de la manifestación a sus acompañantes.

A las 4 de la tarde se repartió el almuerzo de un grupo de manifestantes. Tres autobuses marca Yutong continuaban estacionados en la avenida Baralt.

La «unión cívico-militar» no se restringe a los espacios de la concentración. En la esquina El Conde se encontraba un grupo de hombres con camisas negras y chalecos antibalas.

Foto: @VTVCanal8

POLÍTICA · 30 ABRIL, 2019

En menos de una cuadra chavismo se mantiene «leales siempre, traidores nunca» este #30Abr

Texto por Shari Avendaño | @shariavendano

Decenas de personas se acercaron al Palacio de Miraflores para manifestar que se mantienen «leales siempre, traidores nunca» al chavismo, quien este martes 30 abril se enfrenta a la ejecución del inicio del  «cese de la usurpación«, anunciada por el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, líder de la oposición venezolana.

La mañana de este martes, Guaidó difundió un mensaje en sus redes sociales, en el que dice que el «cese de la usurpación empezó hoy». La transmisión fue grabada en los alrededores de la base aérea La Carlota y en compañía del preso político, Leopoldo López.

Minutos después del anuncio, el «número dos» del chavismo y presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello, llamó a la ciudadanía a concentrarse en los alrededores del Palacio de Miraflores a «defender a la revolución».

Efecto Cocuyo estuvo en la concentración desde la 1 de la tarde y conversó con algunos militantes. Según testimonios de comerciantes en el lugar, los adeptos empezaron a llegar a partir de las 7 de la mañana, «pero ya a esta hora (2 de la tarde) muchos se han ido».

Los manifestantes estaban concentrados desde la esquina Carmelitas hasta la esquina Bolero, donde estaba ubicada la tarima desde la que se escuchaban las alocuciones de los diputados de la Asamblea Nacional Constituyentes.

De Carmelitas a Puente Llaguno, el chavismo buscaba protegerse del sol en la poca sombra que daban los edificios de los ministerios de Finanzas y Relaciones Exteriores, por lo que no había gran cantidad de personas en la vía. La mayor cantidad de militantes se observó a partir de Puente Llaguno, sin embargo no había dificultades para caminar de un extremo a otro de la manifestación.

«Sólo el pueblo salva al pueblo»

«¡Pueblo a la calle!», dice una señora a su acompañante mientras se ríe y baila. Ambas portan una bandana tricolor en el brazo, símbolo de la lealtad al fallecido expresidente Hugo Chávez desde el año 2013. Ambas se reguardan del sol a unos metros de la tarima y escuchan con atención las palabras de un constituyente.

«¡Hoy más que nunca unión cívico-militar! Estamos en combate como dijo nuestro comandante supremo (Hugo Chávez). ¡Vigilia, preparados para la acción!», indicó un militante del chavismo desde la tarima.

Más temprano, alrededor de las 11:00 de la mañana, antes de que se instalara la tarima en la esquina Bolero, Cabello había hablado a la militancia desde un camión. Desde entonces, ningún otro dirigente de relevancia del chavismo habló desde el escenario.

En puente Llaguno estaban estacionadas dos filas de motos. Cerca de ellas, un camión decorado con banderas de Venezuela transmitía en vivo la señal del canal estatal, Venezolana de Televisión (VTV), que repetía las declaraciones del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.

«Estos chamos no se dan cuenta y eso da arrechera (molestia)», dijo un hombre al grupo que lo acompañó a la concentración sobre la oposición venezolana. A juicio de voceros chavistas, como el Canciller Jorge Arreaza, la acción a los alrededores de la base aérea La Carlota cuenta con el apoyo de los Gobiernos de Estados Unidos y Colombia.

«Estaba escuchando Radio Rumbo y el locutor dijo que no había internet desde hace varias horas y yo dije «¿será que es un golpe de Estado?»», comentó una señora que se identificó como «colectiva«.

En vigilia

«Tengo un anuncio importante que hacerles: ¡se les espichó (acabó) lo de Altamira!», dijo desde la tarima un constituyente a la militancia sobre la protesta de la oposición en la zona, en la que se registraron heridos. Pocas personas reaccionaron a lo dicho por el líder chavista. Las personas estaban concentradas en sus conversaciones y buscaban la forma de protegerse del sol.

Varios hombres con chalecos antibalas y armas largas, algunos vestidos de civil y otros con uniforme militar, caminaban de un lado a otro bajo la tranquila mirada del chavismo; conforme a la «unión cívico-militar» que promueve la gestión de Nicolás Maduro.

La calle se fue quedando sin chavismo a partir de las 2:34 de la tarde. Los espacios vacíos se volvían a llenar con grupos de empleados públicos que al rato también se retiraban. A las 3:28 de la tarde llegó un grupo de motorizados. Tres de ellos resaltaban: tenían el rostro cubierto con una tela que apenas dejaba ver sus ojos. A esa hora, el chavismo se concentraba entre el extremo más próximo a la esquina Bolero y la tarima.

Minutos después, un grupo más nutrido de colectivos llegó. Esta vez, 13 personas tenían la cara tapada.

«Esa es una fuga por donde lo veas. Lo mejor que puede hacer es irse del país y quedar en el olvido. Cuando (Juan) Guaidó se fue a Colombia dije que se acabó el problema. No entiendo cómo le quitaron la inmunidad y no pasa nada«, comentó uno de los participantes de la manifestación a sus acompañantes.

A las 4 de la tarde se repartió el almuerzo de un grupo de manifestantes. Tres autobuses marca Yutong continuaban estacionados en la avenida Baralt.

La «unión cívico-militar» no se restringe a los espacios de la concentración. En la esquina El Conde se encontraba un grupo de hombres con camisas negras y chalecos antibalas.

Foto: @VTVCanal8

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