“No vamos a descansar hasta que este proceso arranque”, aseguró el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero acerca del diálogo por el cual se encuentra en Caracas cumpliendo funciones como mediador, entre el Gobierno y la oposición, del cual adelanta que será “largo duro y difícil, pero es lo que Venezuela necesita”.
Afirmó que el diálogo como tal no ha comenzado, pues esto es una fase previa y por eso evitó referirse a temas específicos como la solicitud de revocatorio de la oposición, la liberación de los presos políticos o la posible disolución de la Asamblea Nacional, tal como lo ha señalado Maduro.
“Queremos un diálogo que aborde los problemas sociales, económicos e institucionales. Unasur ha conminado a las reglas democráticas y a la Constitución…”, indicó en la rueda de prensa ofrecida junto al exmandatario dominicano, Leonel Fernández, quien coordinará un equipo económico para evaluar temas como el desabastecimiento de alimentos y la inflación, con el propósito de reactivar la economía en Venezuela.
La noche de este miércoles 18 de mayo, Zapatero se reunió con el presidente Nicolás Maduro y con la canciller Delcy Rodríguez, mientras que este jueves 19, el político ibérico estuvo sentado con el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, el gobernador Henrique Capriles Radonski y los diputados, Enrique Márquez, Freddy Guevara, Timoteo Zambrano, Julio Borges y el secretario de la Mesa de la Unidad, Julio Borges.
“Nuestro objetivo es muy claro, poner en marcha e intentar un proceso de diálogo nacional en Venezuela. Debo decir que tanto Maduro como el presidente de la Asamblea Nacional y la MUD han expresado su voluntad”, dijo durante una rueda de prensa que realizó desde el hotel Meliá Caracas.
Para Zapatero es indispensable que haya separación de poderes en un país democrático, por eso pidió colaboración a todos los políticos venezolanos, pero también llamó a la comunidad internacional a contribuir en el buen diálogo que para el vocero de la comisión de enlace pasa por no “desbocarse” verbalmente.
“No conozco a (Luis) Almagro cada uno tiene su estilo. Me gustan más las palabras menos fuertes. Cada uno se expresa como quiere. Todo lo que rodea Venezuela genera un gran interés en la comunidad internacional, mi opinión es que se necesitan palabras constructivas que se escuche más diálogo, respeto, tolerancia, concordia, convivencia y paz. Las palabras tienen su importancia y muchas veces las palabras fuertes no ayuda”, respondió, sobre las declaraciones del Secretario General de la OEA, quien llamó a Maduro “dictadorzuelo”.
Zapatero no tiene previsto reunirse ni con los familiares de los presos políticos ni ir a Ramo Verde, donde está recluido uno de los líderes opositores, Leopoldo López.