El uso de la huelga de hambre, como herramienta de lucha para evidenciar injusticias, presionar al poder y lograr cambios que de otra manera serían imposibles, es considerada una medida extrema que debe responder a una estrategia que permita la consecución de objetivos, so pena de que la medida sea inútil, debilite la causa e incluso le genere daños y hasta la muerte a quien la practica. En pocas palabras, a una huelga de hambre se debe saber entrar y saber salir.
Durante parte de la primera mitad del siglo XX Mahatma Gandhi utilizó la huelga de hambre y el ayuno como un método eficaz y con ello se convirtió en una fuerza moral e instauró una nueva forma de enfrentar la opresión: la no violencia y la resistencia pacífica que logró la independencia de India del Imperio Británico. Inspirado en su ejemplo el estadounidense César Chávez se erigió en una figura ejemplar en la lucha por mejores condiciones de vida para los campesinos de ese país.
Sin embargo, no siempre los resultados han sido alentadores. El 5 de mayo de 1981 moría el irlandés y líder del IRA, Bobby Sands, luego de 66 días de una huelga de hambre. En cuatro meses otros nueve prisioneros irlandeses que, junto a él o posteriormente se habían sumado a esta restricción, fallecieron. El Gobierno de Margaret Thatcher manejó con mano dura la situación, entre otras cosas, porque la primera ministra consideraba que los presos querían imponer su control de la prisión donde purgaban condena por actos terroristas. A ella se le atribuyen frases como esta: “El Sr. Sands era un criminal convicto. Eligió llevarse su propia vida. Una opción que su organización no dejó tomar a muchas de sus víctimas”.
Este método de lucha no puede ser tomado a la ligera, ni banalizado. Ni por aquellos que en algún momento declaran que lo harán y luego usan alimentos, ni por las autoridades que en actitud cruel y violatoria de derechos humanos exponen a los huelguistas a situaciones de peligro.
El reciente levantamiento de la huelga de hambre que cumplía el exalcalde Daniel Ceballos desde que fue trasladado a la cárcel 26 de julio es una muestra de lo delicado que puede ser iniciar un ayuno, y más complicado salir de él. El tachirense estuvo 20 días sin ingerir alimentos, el jueves pasado luego de una intensa mediación y negociación, en donde jugó un papel importante la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica, decidió parar- Luego se anunció su traslado a la sede del Sebin, ubicada en El Helicoide, en Caracas.
Su esposa Patricia Gutiérrez ha afirmado que se empezó a cumplir el petitorio que lo llevó a abstenerse de comer. Sin embargo, esto no es tan así. Aún el CNE no fija fecha para las elecciones, ni se libera a los presos políticos y tampoco está definido que vengan observadores internacionales al proceso electoral.
No obstante, la decisión de Ceballos fue bien acogida. Ante la intransigencia del Gobierno y el fantasma de la muerte de Franklin Brito, quien falleció luego de tres huelgas en demanda de que le devolvieran sus tierras, Ceballos y también Leopoldo López recibieron cientos de peticiones para que levantaran la huelga. Se lo solicitaron familiares seguidores, la Iglesia Católica y el gobernador Henrique Capriles, entre otros.
Uno de los comentarios más polémicos fue el de Laureano Márquez, quien escribía: No puedes hacerle huelga de hambre a quien te quiere muerto.
El líder tachirense por tanto tomó de manera oportuna el salvavidas que le lanzaron y con esto generó gran alivio en muchos.
Por su parte, Leopoldo López ha informado que continuará en huelga de hambre. Este sábado los expresidentes Horacio Quiroga y Andrés Pastrana le enviaron una carta para intentar persuadirlo de que ya cese el ayuno. Argumentan que la situación es ahora muy diferente a la de 20 días atrás.
“El CNE aún no fija la fecha, pero sus jefes se vieron obligados a aceptar tu petitorio. El Presidente Maduro el 6 de Junio pidió que se acepte los resultados de elecciones, que hasta ese día él NO quería convocar. El 11 de Junio, en Bruselas, el Vicepresidente Arreaza aseguró que este año 2015 se darán las elecciones parlamentarias. Estos comicios serán realidad este año, como mandan las leyes venezolanas. Además, el acompañamiento internacional está en marcha: UNASUR el 8 de junio a través de su Secretario General Ernesto Samper, la OEA el 10 de junio a través de su Secretario General Luis Almagro, y la UE el 11 de junio a través del Director de las Américas Christian Leffler, han manifestado su disposición a enviar misiones de observación a las elecciones parlamentarias. Los tres organismos multilaterales han respondido claramente tu petitorio”
Agregan: “Venezuela requiere tu inteligencia, valentía y espíritu indomable dibujando a colores. Venezuela te necesita fuerte, sano”.
Nadie puede a decir a ciencia cierta si López tomará como Ceballos este suerte de flotador para salir de manera ganadora de este trance. Su esposa, Lilian Tintori asegura que le pediría lo mismo, pero que lo conoce y no crea que vaya a ceder.
Aunque es temprano para evaluar los resultados de estas huelgas de hambre, que llamaron la atención internacionalmente, es evidente que, sin un grupo de apoyo, cumplirla hasta alcanzar claramente algunos de los objetivos es cuesta arriba.
Recientemente otros se han sumado al ayuno y según cálculos de opositores hay 100 personas en huelga de hambre, lo cual, podría aumentar el riesgo de fracaso de la acción debido a que no todos cumplen con la rigurosidad que una herramienta extrema como esta demanda.
A una huelga de hambre hay que saber entrar y también como salir. So pena de perder mucho. Es polémico plantearlo, pero en el seno de la oposición luce necesario una evaluación que supere la división interna, reduzca el espacio para la ejecución de acciones unilaterales y revise el costo de estas acciones que ponen riesgo la integridad física de los dirigentes y la integridad moral de sus seguidores.