La presidenta de la Federación Nacional de Sociedades de Padres y Representantes (Fenasopadres), Nancy Hernández, consideró que antes de pensar en retornar a las aulas es necesario evaluar las condiciones de las escuelas para garantizar la prevención del COVID-19.
Calificó esta propuesta del gobernante Nicolás Maduro de “improvisada”. Aseguró que como organización no han sido convocados a participar en el debate que planteó el mandatario, pero que “por los caminos verdes” les llegó un cuestionario en línea de la Zona Educativa del estado Táchira.
Criticó que esa consulta no sea anónima y señaló que es sesgada porque se pregunta por el compromiso del encuestado con la educación a distancia. “Es un sector del país que ellos están consultando, es a su gente”, dijo.
En entrevista con Efecto Cocuyo la profesora contó que en abril, a un mes de que se suspendieran las clases presenciales por la pandemia del COVID-19, la organización envió comunicaciones al Ministerio de Educación y a la Asamblea Nacional con una propuesta que insistía en la necesidad de llegar a un acuerdo, “por encima de cualquier diferencia política”.
Fenasopadres propuso elaborar un diagnóstico escuela por escuela, tanto del sector oficial como del sector privado, para conocer la realidad de cada plantel. Solo con esta data, señaló Hernández, sería posible saber qué hace falta y cuánto se debe invertir.
Recomendaron levantar información sobre infraestructura, servicios públicos, disponibilidad del Programa de Alimentación Escolar (PAE) y sobre la cantidad de docentes y cuáles eran sus cargos.
Cooperación internacional
Nancy Hernández señaló que con una evaluación de este tipo sería posible diseñar un programa de atención inmediata e incluso a través de mecanismos de cooperación internacional, “tal como se hizo con el sector salud”.
Del documento solo recibieron un acuse de recibo de la Asamblea Nacional. Sin embargo, ambas instituciones (el Parlamento y el Min. Educación) hicieron caso omiso. “Pero aún estamos a tiempo”, dijo la profesora.
Agregó también que es necesario hacer una evaluación de cómo culminó este año escolar, que desde finales del segundo lapso tuvo que desarrollarse a distancia. Señaló que ya el período académico venía con fallas, considerando que en el 2019-2020 se perdieron semanas de clases por los megaapagones.
“El ministro Aristóbulo Istúriz dijo que todo terminó muy bien, que el año escolar terminó de manera exitosa y esa no es la información que tenemos de padres de escuelas públicas y privadas”, dijo.
La representante de Fenasopadres advirtió que el diseño de un plan de regreso a clases “tiene que abordarse de manera diferenciada y progresiva”.
Sobre la propuesta de Maduro de adaptar la asistencia al esquema 7+7 de una semana de cuarentena radical y otra de flexibilización, manifestó su preocupación.
“En materia educativa, la rutina, la práctica diaria de las cosas es lo que conforma el hábito, no se puede consolidar si la rutina se ve interrumpida… además, ¿qué pasaría si esa semana que toca volver arrecia la pandemia, se acaba la gasolina o ocurre un paro de transporte?”, expresó.
Hernández consideró que es necesario hacer un acompañamiento a los padres y representantes para llevar adelante el proceso educativo, ya que no todos cuentas con las herramientas para apoyar el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Más dudas que certezas
La representante de Padres Organizados, Adelba Taffin, dijo a Efecto Cocuyo que la ONG tampoco han sido invitados a debatir sobre el regreso a clases.
Sin embargo, la asociación considera que se trata de “una insensatez” tomando en cuenta las carencias actuales que hay en los planteles, especialmente en cuanto a la infraestructura escolar y la disponibilidad de agua.
“En muchas escuelas hasta les solicitan a los padres llevar cloro y desinfectante. No se les hace ninguna inversión para dotarlas adecuadamente. Un 40 % no tiene suficientes pupitres”, dijo.
Taffin se preguntó cómo garantizará el Estado que los niños no se contagien de coronavirus. Destacó que el gobierno debe publicar los protocolos que implementarían.
“¿Van a suministrar gel antibacterial, tapobocas para los estudiantes y para los profesores? ¿van a reparar las tuberías para que haya agua y puedan asearse cuantas veces sea necesario? Esas respuestas tiene que darlas el gobierno”, expresó.
Agregó que, además, existen debilidades en el PAE y hay niños con desnutrición, por lo que señaló que en esas condiciones no sería posible un retorno seguro a las aulas.