Este 26 de octubre,Yocleiver Sevilla cumpliría 17 años. Su madre, Ana Gudiño, lo recuerda con profundo pesar: hoy era su cumpleaños. De acuerdo con  su testimonio, dos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana lo habrían asesinado la noche del sábado 25 en el sector La Inos de Mamera. Entre lágrimas dice que no entiende porqué, que no hay causa que ella pueda recordar.

Cerca de las 10:00 pm de ese sábado -cuenta Gudiño- mientras el joven hablaba con un amigo de 14 años, dos efectivos llegaron en sus motos,  amarraron a los dos jóvenes y pretendían llevarlos a una zona apartada a la altura del barrio.  Mientras rodaban, el menor de los muchachos se lanzó por un despeñadero y logró escapar. “Se fracturó la mandíbula”, agregó la señora.

Yocleiver, en cambio,  fue conseguido muerto al día siguiente. Tenía tres disparos y estaba descalzo. Era el mayor de tres hermanos. Su madre dice que no andaba en malos pasos, trabajaba a diario con su abuelo en una fábrica de bloques y por las tardes estudiaba en un parasistema.

No sería el primer adolescente muerto en ese sector en lo que va de año. El 23 de mayo, otro joven de 17 años murió a disparos. Según comentaron familiares, Yoandris Mercado  estaba sentado frente a la casa de un amigo en el barrio y un pistolero lo atacó.

El testigo que fue atacado junto a Sevilla huyó con miedo, a solicitud de su madre. Temen que los funcionarios, como viven en el barrio, tomen represalias y vuelvan al sector para asesinarlo. La madre de Sevilla no sabe dónde está el joven y explica que él se lo contó todo por teléfono.

“No sé si pueda hacerse justicia, porque en este país los policías son más malos que los malandros”, se lamenta.  Sin embargo, confía en lograrlo. “Así sea eso”, concluye desde la morgue donde espera que la dejen llevarse el cuerpo.

 Según reseñó el portal Contrapunto, este fin de semana también fue asesinado otro adolescente de 17 años. Se trata de Willian Daniel Jáureguila, quien la misma noche del sábado 24 de octubre fue a la Misión Vivienda de La Paz para celebrar el cumpleaños de su novia y en la madrugada bajó a comprar licor. En el camino se habría topado con unos delincuentes que lo asesinaron. Cerca de las 2:00 am sus parientes se enteraron de que su cuerpo estaba en una funeraria cercana, sin su teléfono y otras pertenencias. El adolescente trabajaba en El Cementerio en la Misión Barrio Nuevo Tricolor.

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