fuerza innecesaria
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Israel ha utilizado la fuerza de forma innecesaria y desproporcionada contra manifestantes palestinos, quienes protestan desde hace algunas semanas contra el desahucio de familias palestinas de un barrio de Jerusalén Este ocupada, dijo este 11 de mayo la Oficina de Derechos Humanos de la ONU.

“Las Fuerzas de Seguridad Israelí deben permitir y garantizar el ejercicio de las libertades de expresión, asociación y reunión. Ninguna fuerza debe ser utilizada contra aquellos que ejercen estos derechos pacíficamente”, sostuvo el portavoz de la Oficina, Rupert Colville.

Cuando el uso de la fuerza es necesario debe hacerse respetando plenamente las normas internacionales de los derechos humanos, que prohíben el uso innecesario y desproporcionado de la fuerza. Esto no ha sido el caso en los últimos días”, agregó.

El desalojo tiene la intención de que colonos israelíes ocupen el área, lo que causó indignación entre los palestinos, que han acentuado sus protestas en los últimos días.

El Ministerio de Sanidad de Gaza ha informado de que al menos veintidós palestinos, entre ellos nueve menores, murieron y un centenar quedaron heridos, en la respuesta de Israel.

Las autoridades israelíes sostienen que su acción responde al lanzamiento de misiles contra áreas civiles desde territorio palestino, una agresión de la que acusa al movimiento Hamás.

Colville consideró que “no es fácil decir quienes son los culpables de los misiles” porque “Hamás no es el único grupo en Gaza, donde hay otros grupos armados, y no está claro quién los ha lanzado”.

Al respecto, sostuvo que la utilización indiscriminada de armas peligrosas en áreas civiles podría ser “potencialmente un crimen de guerra”.

Grupos armados palestinos habrían lanzado unos 250 cohetes contra Israel en las últimas veinticuatro horas, que han causado diecisiete heridos entre los civiles.

Sobre los enfrentamientos, la ONU está particularmente preocupada por su impacto en los niños y ha pedido que se libere a los menores detenidos.

Israel moviliza soldados

El ministro de Defensa de Israel, Beny Gantz, dio luz verde este 11 de mayo a la movilización de 5.000 soldados de reserva para hacer frente a la creciente escalada de violencia con Gaza, mientras siguen los disparos de cohetes desde la franja y los bombardeos de represalia israelíes sobre el enclave palestino.

El objetivo de la convocatoria es “expandir la actividad” de la actual operación militar que el Ejército israelí está realizando, y “profundizar la defensa” del territorio israelí. Desde las 3.00GMT de este lunes las milicias dispararon 250 proyectiles y las alarmas antiaéreas no paran de sonar.

Israel ha respondido con bombardeos contra 140 objetivos de los grupos islamistas Hamás y Yihad Islámica y ataques selectivos contra el liderazgo de las milicias.

El Ministerio de Sanidad de Gaza confirmó la muerte de veintiséis palestinos del enclave. Entre los fallecidos hay milicianos -algunos de ellos muertos en ataques selectivos-, civiles y también menores.

El disparo masivo de cohetes impactó también contra edificios residenciales en Ashkelon y Ashdod y provocó al menos una docena de heridos.

Este mediodía, las brigadas Al Qasam -brazo militar de Hamás- se atribuyeron el lanzamiento de una nueva ráfaga de cohetes contra estas localidades, aseguraron que fue el “lanzamiento de mayor envergadura” realizado desde el inicio de la escalada y agregaron que fue en respuesta al ataque israelí de edificios de civiles en Gaza.

Según el digital Times of Israel, fueron disparados unos cuarenta cohetes en esta ronda y dos personas resultaron heridas leves por ello.

El jefe de Estado Mayor del Ejército, Aviv Kochavi, declaró que todas las unidades deben prepararse para una campaña más amplia que podría tener una duración indefinida, informó el diario Haaretz.

Los lanzamientos desde Gaza, considerados para Israel “una línea roja”, han disparado la violencia entre palestinos e israelíes, que comenzó con disturbios y protestas en Jerusalén.

Hasta la madrugada esas protestas siguieron produciéndose en la Ciudad Santa, y se extendieron por numerosos puntos de la región.