La señora Paula Chacón tiene un negocio de ventas de ropa en el mercado Cacique de Maiquetía, estado Vargas; además de prendas de vestir para damas, desde hace tres meses en el local ofrecen el servicio de cajero “automático popular”, donde la gente saca dinero en efectivo y le cobran una comisión de 15% por retiro desde un punto de venta.

“La mayoría de las personas vienen cuando no encuentran dinero en los cajeros, que es casi siempre, cuando la cola es muy largas y cuando van a sacar cierta cantidad de dinero que el cajero no puede darle”, detalló Chacón.

Cobran 15% por retiro si la tarjeta es de débito; en el caso de una de crédito el valor de la transacción  es de 25%. “Frecuentemente, los que retiran dinero en el local son usuarios con tarjeta de débito. Algunos se quejan por el porcentaje, pero el banco nos cobra por transacción“.

Diariamente, a la tienda de Chacón van alrededor de cuatro personas; mientras que los días feriados y en temporada alta, al menos, seis personas a acuden a sacar dinero en efectivo. El negocio es lucrativo, pero la vendedora advierte que representa un peligro por los índices de inseguridad en la región. Añadió que en el mercado varguense, entre más de 100 locales, unos cinco aplican este método.

En los establecimientos donde operan “cajeros populares” no hay límites de retiro, siempre y cuando en la tienda cuenten con la cifra requerida por el “cliente”. “Nosotros le damos a las personas lo que esté dispuesta a sacar“, dijo la vendedora.

En la panadería donde trabaja Carolina Landaeta como cajera también hay retiros de efectivo por punto de venta. Cobran el 10% por la transacción  y no aceptan tarjeta de crédito. “Esto no se hace todos los días, pero en la semana vienen como cuatro personas a realizar retiros; es que los cajeros solo dan 600 bolívares cuando no son del mismo banco, mientras que por el punto de venta pueden retirar gran cantidad de dinero”.

Práctica común, dicen los economistas

El economista Carlos Oliveros asegura que esta práctica es algo normal y se hace en todo el mundo. “En Venezuela toma más auge por la necesidad de tener dinero en efectivo, el cono monetario en el país está incompleto”.

Tras apuntar que aunque no es el deber ser, el que se pueda sacar dinero en comercios es una ayuda, pues muchos cajeros automáticos no están funcionando,  dan poco dinero a tarjetas de otros bancos o se les acaba el efectivo en un promedio de tres horas. “En otros países, el uso de efectivo es menor. En Venezuela hay muchos pagos que se tienen que hacer en efectivo”, agregó.

Considera que el cobro del 20% de comisión  es un porcentaje muy alto, pero que “lo que no se ve en muchas partes del mundo es que los cajeros automáticos no sirvan. La economía está distorsionada porque los cajeros se dañan y no hay repuestos para repararlos, en este país la gente necesita grandes cantidades dinero”.

Usuarios confirman desde distintos puntos del país

A través de #CocuyoWhatsApp se hizo una consulta para saber si han realizado retiros de dinero en establecimientos comerciales. De 24 personas que respondieron, 20 afirmaron haber utilizado un punto de venta en los comercios para recibir efectivo.

Un residente de Aroa, en el estado Bolívar, contó que frecuentemente retira dinero de esta manera, “En mi pueblo solo contamos con tres cajeros, dos de Banesco y uno de Bicentenario; las colas son interminables y se les acaba rápido el dinero. El porcentaje que cobran es de 5%”, dijo.

Un vecino de Delta Amacuro aseguró que siempre tiene que hacer los retiros en los comercios por “el pésimo servicio de los bancos y cajeros automáticos de la banca pública”. Por cada retiro le cobran el 10%.

En algunas zonas de Caracas también funcionan estos negocios. Carmen Aguilera dijo que en el mercado de San Martín hay un local que cobra el 10% por avance de efectivo desde la tarjeta de alimentación y la tarjeta de débito. “Antes hacía retiros, dinero cuando no había plata en los cajeros, en Farmatodo y no cobraban nada, pero en dos ocasiones he retirado en San Martín”.

Ingrid Belisario contó que recientemente llegó a las 6 de la tarde al terminal de La Bandera procedente del estado Portuguesa. No tenía efectivo e intentó sacar dinero en un cajero del Banco de Venezuela, pero el cajero automático estaba cerrado; una de las personas que cargan las maletas le informó que había un sitio donde podía sacar dinero. Belisario fue y retiró Bs. 2.000 y le cobraron 200 bolívares por el servicio.

</div>