Se extienden las sanciones financieras. La Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos restringió aún más las transacciones que ciudadanos y empresas norteamericanas puedan tener con la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa).

Las nuevas acciones incluyen licencias que autorizan solo algunas transacciones específicas y actividades relacionadas a Pdvsa y sus subsidiarias.

“Como resultado de la acción de hoy, todos los bienes e intereses en la propiedad de Pdvsa sujetos a la jurisdicción de los EEUU están bloqueados. Y las personas de los EEUU en general tienen prohibido realizar transacciones con ellos”, se lee en el comunicado de la institución.

Entre las licencias emitidas por la administración de Donald Trump se encuentran limitaciones a la compra de gasolina proveniente de Pdvsa y la autorización para las transacciones de algunos títulos de bonos o deudas.

Con esta acción el Departamento del Tesoro busca intensificar la presión sobre el Gobierno de Nicolás Maduro, según precisó dicha institución. Además, son orientadas a brindar apoyo al presidente encargado, Juan Guaidó, a la Asamblea Nacional y “a los esfuerzos del pueblo venezolano por restaurar su democracia”.

“La designación de hoy de Pdvsa ayudará a evitar que Maduro desvíe más los activos de Venezuela y los mantenga para el pueblo de Venezuela. El camino hacia el alivio de las sanciones para Pdvsa es a través de la transferencia expedita del control al Presidente Interino o un Gobierno posterior, elegido democráticamente”, precisa el documento del Gobierno estadounidense.

No son las únicas sanciones contra Pdvsa

En agosto de 2017 el Departamento del Tesoro también prohibió a los ciudadanos y empresas de Estados Unidos participar en la compra o venta de bonos emitidos por el Estado venezolano y la estatal Pdvsa. Ello con la intención de restringir el financiamiento al Gobierno de Nicolás Maduro.

A estas sanciones se incluyen la prohibición de transar con el petro, la “criptomoneda” venezolana creada para evadir las restricciones financieras estadounidenses, y la restricción para transacciones que involucran el oro venezolano.

Ello ha limitado las transacciones operativas de la administración de Maduro, que ha perdido socios comerciales y se encuentra retrasado en el pago de la deuda externa por un monto de al menos 9.000 millones de dólares.

Foto principal: Prodavinci