La UEFA Nations League se expandirá para incluir a las 10 selecciones sudamericanas a partir de la edición de 2024, según el vicepresidente de la UEFA, Zbigniew Boniek.
En una medida que se verá como una clara oposición al plan de la FIFA de celebrar la Copa del Mundo cada dos años, la UEFA y la CONMEBOL, firmaron un Memorando de Entendimiento renovado y ampliado el miércoles para comprometerse con la “apertura de una oficina compartida de la UEFA/CONMEBOL en Londres y la posible organización de una variedad de eventos de fútbol”, indica el portal deportivo Espn.
“Esta es la última UEFA Nations League en este formato”, dijo Boniek, exdirector de la federación polaca, en una entrevista con Meczyki. “Tuvimos una reunión con la Conmebol, la confederación de países sudamericanos. A partir de 2024, equipos de este continente se sumarán a la competencia.
“¿Cual será el formato? Todavía estamos trabajando en ello. El calendario de partidos de las selecciones nacionales está restringido, por lo que no se puede mezclar demasiado”.
Boniek indicó que las seis naciones sudamericanas mejor clasificadas, Argentina, Brasil y muy probablemente Colombia, Chile, Perú y Uruguay, se agregarían a la Liga A de la UEFA Nations League. Eso establecería partidos de gran nivel contra equipos como España, Alemania, Inglaterra y Francia, rivales a los que las naciones sudamericanas no han podido enfrentar desde que la UEFA Nations League reemplazó los amistosos internacionales.
Las otras cuatro selecciones, Bolivia, Ecuador, Paraguay y Venezuela, se unirían a la Liga B.
La FIFA aún tiene que establecer el calendario internacional de partidos a partir de 2024, pero quiere celebrar la Copa del Mundo cada dos años, con competiciones continentales como la Eurocopa en el medio. La UEFA y la Conmebol ya han manifestado su oposición a este plan, al igual que las principales ligas europeas, y en su lugar han presionado para trabajar juntas en su propio torneo usando fechas que la FIFA querría usar para su propio evento.
Al crear lo que muchos verían como una mini Copa del Mundo, agregará presión a la FIFA, que también quiere establecer su propia Liga Global de Naciones.