Al mediodía del 24 de enero, el barrio José Félix Ribas fue tomado por los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Los integrantes de las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes) buscaban a los responsables de los disturbios de la noche anterior, en los que atacaron un módulo de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
El despliegue se hizo en la Zona 6 y 10, al igual que en sectores cercanos. Tenían información de que en esos sitios se ocultaba la banda de “El Wileisy”, a quien señalan de comandar el tiroteo del 23 de enero en la avenida Francisco de Miranda a la altura de Palo Verde hasta Petare.
Para las 4:00 pm se conoció que el resultado de ese operativo fue de un supuesto delincuente fallecido. Le incautaron una pistola Glock 9mm. Al parecer se trata de un miembro de la banda “El Wileisy”, muy cercano al líder.
Noche entre ráfagas
Fuentes policiales aseguran que el grupo delictivo aprovechó la protesta que se originó a las 8:00 pm, para arremeter contra la GNB. A las 9:00 pm del 23 de enero, ya había enfrentamientos con armas de fuego.
Funcionarios de la Policía de Miranda, Policía de Sucre y Faes tuvieron que unir fuerzas para enfrentar a los vándalos. Además hubo saqueos en José Félix Ribas y una granada detonó debajo del elevado de Palo Verde, mismo lugar en el que supuestamente hubo un fallecido.
“Lo que era primero una protesta se convirtió en un toque de queda. Quien andaba en la calle a esa hora era bajo su propio riesgo. La delincuencia organizada se tomó las calles”, dijo un habitante.
Foto: Cortresía Román Camacho
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