Aún se desconcierta por la atención que ha recibido desde que dejó atrás los árboles del parque nacional Waraira Repano. El adolescente de 15 años de edad que pasó siete días extraviado en la montaña al norte de Caracas, conocida como El Ávila, fue dado de alta el lunes 28 de agosto, tras pasar tres días internado en un centro asistencial de la ciudad donde pacientes, enfermeros y familiares lo buscaban para tomarse una foto juntos.
“Él no entiende por qué todo el mundo quiere hablar con él, por qué es tan importante para la gente. Sigue un poco aturdido, porque para él fue otra la experiencia”, indicó Maryorin Méndez, amiga de la familia del adolescente.
Señaló que los padres del joven prefirieron mantenerlo bajo cuidados médicos debido que algunos valores de su estado de salud aún no se estabilizan. Después de siete horas de descenso desde la quebrada Las Adjuntas hasta la entrada al Ávila en Sabas Nieves, el adolescente fue atendido por presentar un cuadro febril.
Se encontraba con otra jovencita de 14 años de edad, con quien subió el sábado 19 de agosto al Ávila para recorrer la ruta Sabas Nieves–No te Apures. Ese día llovió y se perdieron al tratar de resguardarse del chaparrón.
“Se cayeron varias veces y por eso se lesionaron los glúteos. Esas heridas se infectaron porque, en las noches, se orinaron encima para calentarse y en ningún momento ingirieron alimentos. Solo tomaron agua de un riachuelo, que fue el que siguieron pensando que podrían llegar así a Caracas“, explicó Méndez a Efecto Cocuyo y agregó que perdieron un kilo de peso por día aproximadamente.
La adolescente fue estabilizada en el mismo hospital caraqueño donde atienden al quinceañero, pero los padres de la muchacha decidieron continuar con los cuidados en casa. Ambos guardan una dieta a base de alimentos blandos como yogurt, sopas, papillas y jugos.
Detalles de la búsqueda
Méndez acompañó a la madre del adolescente durante los siete días que tardó en regresar junto a sus seres queridos. En su perfil de Facebook, relató cómo fue el proceso, las atenciones recibidas por parte de los funcionarios militares y bomberiles, así como del Grupo Rescate Humboldt.
Aseguró que de esta forma, la historia de cómo dos adolescentes sobrevivieron en una montaña por seis días no se olvida, pese a que sus padres prefieren mantener al margen de los medios a los muchachos. “Están muy abrumados“, manifestó, por lo que dice que trató de ser respetuosa con su publicación.
“Desde que inició el operativo de búsqueda recibíamos el parte diario entre 7 y 8 de la noche. El jefe de Bomberos y jefe de la comisión de la GN se paraban frente a nosotros a mostrarnos un mapa, a indicarnos rutas y riachuelos con nombres que jamás me aprendí, pero sobre todo se fajaban a darnos tranquilidad (…) La investigación policial se hace cuando, al cruzar las celdas, se dan cuenta que una llamada conectó desde Los Teques y la otra desde El Marqués. Los investigadores son muy maliciosos y siempre piensan lo peor, claro, se trataba además de dos menores y un aviso que puso un familiar con el número de casa trajo lo peor: recibieron una llamada donde aseguraban que tenían a E y que si no entregaban lo que pedían “ya sabían lo que iba a pasar”. Moraleja: Sólo se da el número de instituciones, como los bomberos y PC (…)”, escribió en su muro en la red social.
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