El Observatorio Electoral Venezolano (OEV) determinó que las mujeres venezolanas solo ocupan la quinta parte de los cargos de poder en el país a pesar de representar el 50% (9 millones de electores) de la población con capacidad de ejercer el derecho al sufragio.
Después de una constituyente y cinco resoluciones electorales promulgadas en casi dos décadas, entre las que destaca la resolución de paridad de género que obligó a los partidos políticos a tener 40% de mujeres entre sus postulaciones en 2015, las féminas conservan menos del 20% de la representación real.
Las elecciones parlamentarias del pasado 6 de diciembre ejemplifican la subrepresentación del poder femenino. Las mujeres solo ocupan el 19,8% de los escaños en la actual Asamblea Nacional: 25 a favor de la coalición Mesa de la Unidad Democrática y ocho para el Partido Socialista Unido de Venezuela.
No solo en número de puestos son relegadas las mujeres. La socióloga especializada en temas de género, Esther Pineda, ha señalado que “a las mujeres que ocupan cargos se les relega a los ámbitos de mujer, familia y cultura, considerados aún desde la perspectiva patriarcal de poder como de menor importancia”.
Si bien es cierto que significa un incremento con respecto al 11% de los 165 escaños (18 parlamentarias) escogidos en 2010; 17, 36% de las 167 curules de 2005 y 11,5% (15 mujeres de los 131 diputados elegidos en la Asamblea Constituyente de 1999) adjudicado en 1999, sigue siendo insuficiente.
En las elecciones regionales el panorama no es distinto. El trabajo del OEV señala que en las regionales de 2004 fueron electas solo dos mujeres de 24 gobernadores y dos alcaldes metropolitanos (8,3%) y de 335 alcaldías el 9% eran alcaldesas.
Ante esto, el Consejo Nacional Electoral publicó una resolución en 2005 en la que exhortó a los partidos políticos a presentar sus candidaturas con una composición paritaria y alterna para las elecciones parlamentarias de ese año.
Para el período presidencial que inició en 2007, las mujeres representaban el 18,5% de los miembros del gabinete de Hugo Chávez –un porcentaje inferior al promedio de América Latina y El Caribe (24%)- mientras que en las alcaldías representaban 7,2%, según los datos del Observatorio de Género de la Cepal y el Insituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral.
El CNE emitió otra resolución en 2008 para exigir la asignación de postulaciones de candidatas al Consejo Legislativo, las alcaldías de Caracas, Alto Apure y los concejales al cabildo distrital bajo una composición paritaria y alterna de 50% para cada sexo.
En los casos que no fuese posible aplicar la paridad, la resolución indicaba que debían configurarse las listas con un mínimo de 40% y un máximo de 60% para hombres y mujeres. Pero el resultado de esos comicios fue que menos del 20% de los electores eran mujeres. Solo en los Consejos Legislativos 88 mujeres obtuvieron la victoria de los 233 cargos a elegir, una representación legislativa de 37,8%.
La representación de la mujer en el mundo
El aumento de la representación de las mujeres en el mundo es de apenas 0,5% en comparación con 2014, según el informe de la Unión Interparlamentaria divulgado en marzo de 2016.
El mayor logro se obtuvo en las Américas, cuyo ascenso fue de 0,8% y que le permite seguir a la cabeza en promedios regionales con 27,5% de mujeres legisladoras.
Hoy en día, las mujeres representan al menos un 30% de la composición total del parlamento en más de un cuarto de todas las cámaras parlamentarias (46 cámaras únicas o bajas y 21 cámaras altas).
Para leer el trabajo completo del Observatorio Electoral dar click aquí.
Foto: Asamblea Nacional.